El presidente del Cabildo de La Gomera,Casimiro Curbelo Curbelo,la consejera de Desarrollo del Territorio,Ventura del Carmen Rodríguez y la presidenta del Consejo Regulador del Vino,Armenia Mendoza,se reunirán el próximo jueves con el fin de planificar los pasos que se van a dar después de que hayan trascendido las conclusiones del trabajo sobre la uva forastera. En este estudio se determinó que se trata de una especie de una antigüedad cifrada en,al menos 500 años,con una características muy singulares que la hacen apta para obtener un vino de calidad.
A partir de ahora es necesario llevar a cabo estudios complementarios que desarrollen y completen las investigaciones realizadas hasta este momento por los profesores de la Universidad Rovira il Virgili de Tarragona,Francesca Fort y Fernando Zamora. El presidente del Cabildo ya ha anunciado que dará todo el apoyo posible a los trabajos que se hagan en el futuro,tal y como ha ocurrido hasta ahora.
El objetivo es que,una vez que se han constatado las posibilidades que tiene esta especie autóctona de La Gomera,ver cómo se aplican en la producción de los vinos. Los profesores ya han entregado una planificación sobre la elaboración de estos estudios complementarios. En la reunión también se quiere hacer un repaso de todo el trabajo que se desarrollará durante el presente año entre el Consejo Regulador y el Cabildo.
El trabajo financiado por el Cabildo y encargado por el Consejo Regulador,fue presentado a principios del pasado mes de diciembre ante los viticultores y medios de comunicación de la Isla. En el mismo se ratifica lo que hasta ahora era una hipótesis: la conocida variedad forastera blanca junoniense presenta un genoma especialmente particular,distante del resto de las que forman parte de la base de datos de este grupo de estudiosos,una de las más amplias del mundo. “Esta singularidad puede ser perfectamente aprovechable para vinificar caldos de gran calidad y tipicidad”.
La causa de las particularidades de esta uva radicaría,según la investigación,no tanto en una acumulación de mutaciones desde el inicio de la viticultura en la Isla,sino por cruces o hibridaciones naturales en viñedos ancestrales. O tal vez ambos procesos a la vez. El trabajo resalta la especial singularidad y riqueza varietal que presentan las vides originales de Canarias,pero aún más particularmente de La Gomera. Además,de la forastera también se analizaron otras variedades como el listán blanco y negro,forastera negra,moscatel blanca o malvasía blanca.
La forastera es el resultado de una particular forma de cultivar en La Gomera que se localiza en terrazas o bancales en terrenos accidentados. Esta variedad supone el 90% de la producción de la Isla,cuyos vinos ostentan la Denominación de Origen desde el año 2003. El estudio analizó 110 muestras para concluir que esta variedad presenta un perfil único y singular que se aleja de cualquier otro de los analizados hasta ahora por la Universidad. A parte de la producción de vinos de gran calidad,también se pueden explorar otros campos como el desarrollo del enoturismo,o visitantes especialistas en vinos,con un alto poder adquisitivo,un sector que está al alza.