D. E. TORRES.-No hay ya sintonía entre los líderes del PP y Coalición Canaria. José Manuel Soria y Paulino Rivero han subido de tono en esta última semana en un cruce de críticas que,desde uno y otro partido,sitúan fuera de la campaña electoral y lo llevan a terrenos más personales. Si los pactos al final,como se apunta desde el seno del PP,son entre personas más que entre partidos,hoy por hoy el acuerdo de gobierno con ma-yores posibilidades de llevarse a cabo tras las elecciones del 22-M es el que firmarían nacio-nalistas y socialistas. Ni en el PSC-PSOE,ni en el CC y ni siquiera en el PP dan verosimilitud a un posible pacto PP-PSOE.
Fuentes populares tachan de «insostenible» el anuncio de Soria de estar dispuesto a alcanzar un acuerdo con los socialistas,en el caso de que las urnas coloquen al PP como la primera fuerza del Parlamento regional. Improbable,por el enconamiento entre ambas fuerzas en Madrid casi desde el principio de la legislatura nacional en 2008 y difícilmente justificable,señalan,porque fue precisamente el apoyo de CC al PSOE en el Congreso de los Diputados en el mes de octubre pasado -en la aprobación de la ley de presupuestos generales- lo que motivó la salida de los populares del Gobierno canario. «No se sostiene que se pretenda ahora,siete meses después,llegar a un acuerdo con los mismos a los que se ha hecho responsables de todos los males del país»,subrayan en el seno del PP canario. Y menos a un año de unas elecciones generales para las que el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) señala una distancia a favor de los populares de 10 puntos.
En medio del cruce de declaraciones entre Soria y Rivero -iniciado el lunes pasado por el presidente nacional del PP,Mariano Rajoy,al asegurar que CC se ha dedicado más a «salvarle la cara a Zapatero» que a defender los intereses de Canarias-,el candidato a la Presidencia del PSC-PSOE,José Miguel Pérez,queda indemne. El PP se ha convertido en el único pimpampum de los nacionalistas,no hay ni una sola mención a los socialistas canarios. En el tono de campaña del PSC-PSOE,por su parte,siguen sin caber estridencias. Pérez sólo se ha permitido salirse del guión para ironizar acerca del «extraño cortejo» iniciado por el líder de los populares.
Desde CC,aunque dan por descartado si quiera un acercamiento con la fuerza de Pérez,sí destacan de forma especial las «muy buenas» relaciones entre uno y otro candidato. Ello,amén de que,en clave interna,admiten que un pacto con los socialistas les resultaría ventajoso. Cuanto más necesite el PSOE de los dos diputados nacionalistas en el Congreso «más barato»,apuntan fuentes de Coalición,será formar ejecutivo en Canarias. Y en esa ecuación plantean hasta la posibilidad de un gobierno de Paulino Rivero sin socios,pero con el apoyo en la Cámara regional del banquillo liderado por Pérez.
Ante un acuerdo PP-PSOE improbable y la imposibilidad en Canarias de mayorías absolutas a causa del sistema electoral,los nacionalistas tienen claro,señalan las mismas fuentes,que no están dispuestos a ceder la Presidencia en cualquiera que sea la combinación de fuerzas.