El presidente del Gobierno en funciones,Paulino Rivero,»debe marcharse a la isla de enfrente,que tanto le gusta a él como a su quícara en Madrid o,si lo prefiere,a España con los españoles. Lo que no puede es quedarse en Canarias después de lo que ha hecho». Con este entrecomillado concluía ayer el editor y director de El Día,José Rodríguez,el editorial con el que mostraba su indignación por la adjudicación de las licencias de radio en el Archipiélago que le deja sin las frecuencias que utiliza hasta la fecha.

El periódico que se ha erigido como estandarte del independentismo y del chicharrerismo y azote de los canariones llega a defender en su documento que el líder de los populares isleños,José Manuel Soria,se haga con la Presidencia de la Comunidad Autónoma de Canarias,a pesar de ser de Gran Canaria y de representar a un partido estatal. «Como independentistas no nos vale un partido conservador como el PP,pero mientras no lleguen al Parlamento los auténticos patriotas sabemos que el PP al menos defiende el orden,la moralidad y la decencia»,proclama José Rodríguez,quien entre otros agravios que dice haber sufrido por parte de Coalición Canaria está el de no haber recibido el «merecidísimo» Premio de Comunicación que concede el Gobierno autónomo. El editor de El Día contrapone la «moral,buenas costumbres y decencia» de Soria al «mercantilismo y caciquismo» de los que él denomina «falsos» nacionalistas y entre los que destaca a Paulino Rivero. Al presidente en funciones lo define como un hombre «rodeado de la hez política» de Canarias que sólo se mueve por el «amiguismo» y se rige por un «egoísmo» que le impide ver «la miseria,el paro y la desgracia de la juventud» de las Islas.

«Y don Paulino tan campante,tan alegre y tan pimpante porque ande yo caliente y ríase la gente»,continúa indignado José Rodríguez antes de fijar sus dardos en el candidato nacionalista al Ayuntamiento de Santa Cruz,José Manuel Bermúdez. El Día vuelve a defender que el PP se haga con el bastón de mando de la corporación capitalina de la mano de Cristina Tavío. Bermúdez,argumenta,»no tiene ninguna estatura política y es un atrevido». El socialista Julio Pérez,con el que pacta en estos momentos Bermúdez la gobernabilidad del Consistorio,es «una persona muy válida,una figura política de relieve,pero también un hombre de partido y tiene que obedecer a Las Palmas»,lamenta Rodríguez tras calificar a Paulino Rivero de «déspota e inepto». Entre los menospreciados ayer por El Día están también «la quícara» Ana Oramas y dos asesores: «Un ignorante y sin estudios» y un «niño de papá político».