POR Natalia Junquera.- Sor María Gómez Valbuena se ha negado hoy a declarar ante el juez por su supuesta implicación en un caso de niños robados y,por tanto,permanece imputada por el delito de detención ilegal por el que había sido llamada a comparecer. El juez Adolfo Carretero ha citado mañana a declarar en calidad de testigos a los padres adoptivos de la supuesta niña robada. La monja es la primera acusada directamente tras 1.500 denuncias interpuestas en fiscalías de toda España por madres que creen que les robaron a sus hijos tras el parto.
Gómez Valbuena,con el hábito de las Hermanas de la Caridad,ha acudido poco después de las ocho de la mañana al Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid acompañada por otra religiosa de la congregación y una hora y media antes de la citación para esquivar a los medios de comunicación. A su salida,escoltada por varios policías,no ha podido evitar la gran nube de fotógrafos y cámaras que la esperaban. Con gritos como «Sinvergüenza»,varias madres de niños supuestamente robados han increpado a la religiosa mientras esta abandonaba las dependencias judiciales en un Mercedes Benz todoterreno negro con los cristales tintados.
La monja,de 80 años,ha contratado los servicios de José María Calero Martínez,abogado de los padres de la menor asesinada Marta del Castillo. También la fiscalía de Madrid la citó a declarar como imputada,y también en aquella ocasión la monja se negó a hablar. Decenas de madres que buscan a sus hijos y que han visto sus casos archivados en las fiscalías por falta de pruebas tenían todas las esperanzas depositadas en que esta vez sor María iba a contar al juez lo que hizo y lo que sabe.