El presidente del Gobierno ha dejado meridianamente claro cuál va a ser la respuesta que dará a Alfredo Pérez Rubalcaba este miércoles,cuando comparezca en el Congreso para explicar el Programa Nacional de Reformas aprobado en el Consejo de Ministros del viernes 26 de abril: no habrá pacto si lo que pretende el secretario general del PSOE es volver a las políticas que generaron la crisis,en opinión de Mariano Rajoy; esto es,políticas de estímulo económico,que son,efectivamente,las que ha apuntado el líder socialista.
Además,durante una comparecencia conjunta con el primer ministro italiano,Enrico Letta,con quien mantuvo un encuentro de cerca de hora y media,el jefe del Ejecutivo se refirió a la falta de voluntad de pacto que,en su opinión,tiene el PSOE. «Que me hubiera apoyado antes»,razonó Rajoy cuando se le preguntó por la posibilidad de entendimiento ante la mano tendida del principal partido de la oposición y ha recordado que,de todas las reformas que ha hecho el Gobierno hasta ahora,los socialistas no apoyaron prácticamente ninguna (desahucios,reforma laboral o preferentes,ha citado el presidente).
Con todo,Rajoy argumentó que existe la posibilidad de hablar sobre las reformas que quedan,entre otras,la reforma por la sostenibilidad de las pensiones,de las administraciones públicas o la local. El jefe del Ejecutivo ha dejado claro que lo que espera del PSOE no es tanto una negociación como un apoyo sin matices a sus reformas,ya que ha descartado de plano cualquier propuesta fuera de las suyas.
El presidente del Gobierno ha dejado en el aire la posibilidad de rebajar el IRPF en 2014,que era la intención inicial de Rajoy cuando accedió a La Moncloa y lo subió,aunque el 26 de abril,el ministro de Hacienda confirmó que hasta 2015 no se bajaría. «Ahora hay quien me pide que lo suba y quien me pide que lo baje»,informó el presidente,pero se bajará en 2015 «a lo más tardar».
Europa en positivo
El primer ministro italiano ha confirmado esta tarde su alianza con Rajoy para que Bruselas cumpla con la parte que le toca,esto es,materializar los compromisos adquiridos en junio de 2012,entre otros,la unión bancaria y el plan de empleo juvenil. Éste es el objetivo que se han marcado España e Italia para el Consejo Europeo de junio.
Enrico Letta,además,invitó a los países miembros a trabajar por «reforzar la idea positiva» de Europa,porque el antieuropeísmo está creciendo en la UE,en 2014 hay elecciones europeas y,si Bruselas no cumple sus compromisos,éstas pueden traducirse en una Europa dividida entre partidarios de la UE y detractores de la Unión. «Sería un error imperdonable»,ha admitido Letta.
Los jefes del Ejecutivo españo e litaliano no quisieron entrar a criticar a Alemania,aunque,aparte de instar a la UE (en donde el peso alemán es indiscutible) a que cumpla sus compromisos de inmediato,lanzaron un mensaje nítido: el esfuerzo de la UE para salir de la crisis debe ser conjunto e incluye a Alemania. «Ésta no es una confrontación -aseguró Letta-,es la solución común».