Entre 10 y 15 radicales islámicos somalíes del grupo Al Shabab,según estimaciones del Gobierno keniano,continúan este domingo atrincherados en el centro comercial Westgate,en Nairobi tras un ataque que ha causado al menos 59 muertos,y entre 150 y 300 heridos,según fuentes oficiales.
Entre las víctimas se encuentran cuatro ciudadanos estadounidenses,según ha confirmado el Departamento de Estado de EEUU,dos franceses y dos canadienses,entre ellos un diplomático de 29 años. También ha fallecido tras el ataque el poeta ghanés Kofi Awoonor y dos familiares del presidente de Kenia,Uhuru Kenyatta: su sobrino y la prometida de éste.
«Quiero confirmar que hemos rescatado a más de 1.000 personas»,ha declarado el ministro keniano de Interior,Joseph Ole Lenku. Según el ministro,hay una treintena de rehenes en el centro comercial,»por eso -se justificó el ministro- la operación es muy delicada».
Ole Lenku ha asegurado que las autoridades kenianas tienen el control del circuito de seguridad del edificio y que saben dónde se hallan los atacantes,pero optó por no revelarlo «por motivos de seguridad».
El Gobierno keniano y las agencias de emergencias están siendo cautos en extremo a la hora de revelar información sobre el suceso,so pretexto de que podría dar pistas a los extremistas.
A lo largo de la mañana,el Ejército keniano ha reforzado su presencia en torno al centro comercial asaltado,Westgate,uno de los más lujosos y frecuentado de manera habitual por expatriados y la clase alta keniana.
El Centro de Operaciones de Emergencia de Kenia (NDOCK) había precisado previamente que «a las 06.00 hora local (03.00 hora GMT),el Ejército y las Fuerzas Especiales controlan la primera y la segunda planta de Westgate. Partes de la planta baja y el sótano siguen sin estar seguras».
Heridos dos soldados
Afuera,el edificio continúa rodeado por el Ejército keniano,con media docena de vehículos de combate en la calle Mwanzi,además de ambulancias y la prensa que ha sido alejada del epicentro del lugar.
Preguntado por el motivo de la ampliación del perímetro,que se ha ido incrementando desde las últimas horas de ayer,un soldado ha respondido a los periodistas: «Para que no veáis lo que hacemos».
Dos soldados kenianos que fueron evacuados esta mañana tras ser heridos se encontraban conscientes,y a ambos se les habían colocado vendas antes de ser trasladados a un hospital de la capital keniana.
También las televisiones kenianas han mostrado imágenes de una mujer que ha logrado salir esta mañana sana y salva del edificio,tras haber estado allí retenida desde que comenzó el asalto.
En declaraciones a la prensa local,la superviviente ha relatado que se escondió debajo de un carrito de la compra del supermercado del lujoso centro comercial.
Movilización ciudadana
La Cruz Roja de Kenia (CRK) ha solicitado este domingo una donación masiva de sangre bajo el lema 'Va sobre la vida. Va sobre Westgate',en el centro de Nairobi para recolectar «tantos litros de sangre como se pueda».
«No hay una cantidad específica como objetivo,pero nunca hay suficiente sangre. Esperamos obtener tanta como se pueda y el Gobierno se encargará de distribuirla a los hospitales en los que están ingresadas las víctimas»,dijo a Efe el secretario general de la CRK,Abas Gullet,en conversación telefónica.
El ataque comenzó alrededor de las 13:00 hora local (10:00 hora GMT) del sábado,cuando una decena de miembros de Al Shabab irrumpió en el centro comercial,donde lanzaron una granada en el interior y empezaron a disparar contra los numerosos compradores que se encontraban en el edificio.
Desde octubre de 2011,cuando el Ejército de Kenia entró en Somalia como respuesta a una oleada de secuestros supuestamente obra de Al Shabab en el vecino territorio keniano,los radicales islámicos amenazaron a Kenia con represalias por esa iniciativa.
Desde entonces,se han registrado decenas de ataques en zonas fronterizas con Somalia,en la ciudad portuaria de Mombasa y en el propio Nairobi,que han causado más de un centenar de víctimas hasta el momento.