En la madrugada el pasado domingo,13 de octubre unos golfos que por el momento aún se desconoce su identidad,arrancaron de cuajo el busto del poeta universal gomero,natural de Vallehermoso,Pedro García Cabrera.
Un incidente que ha producido enorme conmoción en su pueblo natal,que ayer domingo y hoy lunes,ha dado muestras evidentes de su malestar e indignación por un suceso protagonizado por unos vándalos,que amparados por la oscuridad de la noche cometieron un delito que más que valorarse por su precio económico,debe estar calibrado por el valor moral y sentimental que posee.
El busto de Pedro García Cabrera que hasta hoy ha estado instalado en la entrada principal de esta localidad norteña,lleva consigo el haber sido uno de los primeros reconocimientos tras su fallecimiento a este hombre,que además de intelectual fue político y defensor a ultranza de los más desfavorecidos.
Nos consta que están abiertas las investigaciones pertinentes para dar con los responsables de semejante ultraje al cariño y al amor de todo un pueblo hacia García Cabrera.
En La Gomera muchas cosas desde el punto de vista de las investigaciones han podido quedar abiertas en el infinito y en la indefinición: incendios e incluso asesinatos. Entendemos que en muchos casos muy difícil será sacar conclusiones definitivas. Pero….. en un pueblo que a determinadas horas de la noche poco es lo que se mueve a pesar de estar celebrándose unas fiestas patronales en las proximidades,muy complicado no será que los autores de este atropello sean imputados y sobre ellos caiga todo el peso que la Ley pueda permitir.
Más que un deseo,lo queremos convertir en una exigencia.
A estos golfos que les caiga todo el peso de la Ley
