Román Rodríguez
En julio de 2012,el Parlamento canario aprobó un texto consensuado para la renovación del Régimen Económico y Fiscal (REF). Un documento,que culminaba,según el Gobierno canario,un proceso de debate y participación,y que fue remitido al Gobierno central como propuesta de Canarias. Ahora,el Ejecutivo canario reabre sorprendentemente el debate con una minigira presidencial que incluye urgentes reuniones con organizaciones empresariales,sindicatos y otros sectores para recoger opiniones y consensuar un nuevo texto.
Desde el 2011,Nueva Canarias criticó,en solitario,el procedimiento empleado por los grupos que apoyan al Gobierno,CC y PSOE. Reclamamos entonces debate,participación y,sobre todo,“realizar un balance riguroso del impacto que las medidas contenidas en el actual REF” han tenido en nuestra economía en este período de desarrollo del mismo.
Nos parecía determinante saber cómo había afectado el REF vigente a la diversificación económica,en qué sectores se había materializado,preferentemente,las dotaciones de la RIC,“cuánto ha influido en la capitalización de nuestras empresas,cuál ha sido el comportamiento de los incentivos fiscales (a la inversión,a la producción de bienes industriales y agrícolas,a las entidades ZEC) en la situación de crisis económica que vivimos desde 2008,etcétera”.
Comparecencia
Entendiendo que esa evaluación es la que permitiría acertar a la hora de “formular nuevas propuestas eficaces y motivadas,reformular los instrumentos existentes o persistir en los que han dado buenos resultados”. Asimismo,considerábamos muy negativo el escaso debate social y parlamentario sobre un asunto de tanto calado para el Archipiélago.
No se hizo nada de lo que solicitamos. No hubo evaluación y el debate fue muy escaso. Quedando limitado a una comparecencia del Gobierno en el Parlamento,el 14 de febrero de 2012,y a la aprobación,cinco meses después,del texto a trasladar a Madrid y a Bruselas.
Ahora,sin documento previo,sin propuestas novedosas,sin justificación de las razones para abrir de nuevo el proceso,el presidente del Gobierno se lanza a una avalancha de reuniones que puede resquebrajar el difícil consenso alcanzado en 2012,como hemos visto en declaraciones sindicales,y que resulta,cuanto menos,poco respetuoso con el Parlamento canario.
Todo apunta a que nos encontramos ante una campaña mediática del Gobierno canario tras la reunión Rivero-Rajoy,del pasado 8 de enero,en el que el trabajo conjunto en torno al REF fue la única conclusión.
En el último tramo de 2013 se abrieron algunas discusiones sobre los contenidos del nuevo REF. La más relevante en torno a la posibilidad de que los incentivos fiscales,
Reserva de Inversiones (RIC) y Deducción por Inversiones (DIC),pudieran ser aplicadas fuera de Canarias. Una opción que,desde NC,rechazamos al entender que es poco presentable ese planteamiento cuando las Islas tienen un desempleo superior al 35%,elevada pobreza y enormes dificultades para captar inversiones públicas y privadas; y,además,porque resulta muy difícil su control fiscal.
Empleo
Insistimos en que los incentivos fiscales del REF deben orientarse prioritariamente hacia el mantenimiento y la creación de empleo en nuestra tierra. Con planteamientos como la minoración de las cotizaciones sociales empresariales para todos los asalariados con contrato por tiempo indefinido en las Pymes,así como para los autónomos; un beneficio condicionado al mantenimiento del empleo y a la mejora de la su calidad o a la creación de nuevos puestos de trabajo. Y que,en ningún caso,puede hacerse a costa de la Tesorería de la Seguridad Social ni de los derechos de los trabajadores; exigiendo,en consecuencia,que las bonificaciones estén presupuestadas.
Reiteramos,asimismo,la gran importancia de las políticas económicas del REF: ayudas al transporte de personas y mercancías,subvenciones a la desalación de agua,financiación del sobrecoste de nuestro sistema eléctrico…determinantes para que los canarios podamos estar en condiciones similares a los ciudadanos y ciudadanas del resto del Estado. Aspectos en los que los distintos gobiernos centrales vienen realizando reiterados recortes a nuestra Comunidad en las cuentas públicas estatales.
A tratar de conseguir esos objetivos,la aprobación de incentivos fiscales que posibiliten generar empleo,las bonificaciones a la Seguridad Social y el cumplimiento por el Gobierno central de las políticas económicas del REF,debe dirigir todos sus esfuerzos el Gobierno canario. Y no a plantear acciones improvisadas y sin contenidos ni a exhibir las contradicciones entre los dos socios de Gobierno,CC y PSOE,sobre la vinculación o no de la reforma del REF con la más que imposible reforma estatutaria. Con el REF no se juega.
Román Rodríguez es diputado en el Parlamento canario y presidente de Nueva Canarias.