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Arias Cañete dice que fue benévolo con Valenciano para no parecer machista

Tras un debate de perfil bajo,ha llegado el verdadero choque. El candidato del PP al Parlamento Europeo,Miguel Arias Cañete,ha afirmado este viernes que «el debate entre un hombre y una mujer es muy complicado». «Si haces un abuso de superioridad intelectual,parece que eres un machista y estás acorralando a una mujer indefensa»,ha subrayado en una entrevista en el programa Espejo Público (Antena 3) en referencia a su participación en el cara a cara de anoche. Una tesis en la que ha incidido aún más: «Con toda la apelación al populismo,con todas las medias verdades o mentiras,si soy yo mismo,me temo. Entraría a matar».
Todo ello,pese a que Cañete no se cansa de acusar a Elena Valenciano de enarbolar «banderas feministas trasnochadas». Pero ha sido el candidato del PP quien ha reducido este viernes la confrontación con la aspirante socialista a un debate sobre feminismo y machismo. Palabras que han encontrado una rápida respuesta de su contrincante. La cabeza de lista del PSOE,Elena Valenciano,ha contestado al popular a través de Twitter: «¿Entonces? ¿Qué hacemos? ¿Fuera mujeres del debate?». Un mensaje que le han enseñado a Cañete en el programa y,ante el cual,el representante del PP ha apostillado: «Para mí es más difícil,me cuesta más». Rubalcaba también ha intervenido,a través de la red social: «Cañete,el machismo del mal perdedor».
El número tres de los socialistas,Óscar López,ha considerado que «si Cañete no sabe debatir con una mujer sin que le llamen machista,es que es un machista». Más tarde,el aspirante popular ha tratado de rebajar el impacto de sus declaraciones utilizando el mismo canal. «Quiero dejar clara una cosa»,ha escrito,»todo lo que he aprendido de Agricultura me lo enseñó una mujer,Loyola de Palacio». Y también: «Siempre hemos creído en las mujeres,como Isabel García Tejerina,al frente del ministerio de Agricultura y María Dolores de Cospedal en Castilla-La Mancha».
«Si debato con el señor Rubalcaba nos podemos decir todas las barbaridades,pero con una mujer se interpreta de otra manera»,ha asegurado también Cañete unos minutos antes,cuando ha aseverado que se «contuvo». Los responsables de la campaña del PP,encabezados por Carlos Floriano y guiados por el sociólogo de cabecera de Mariano Rajoy,Pedro Arriola,consideran que durante la carrera electoral Cañete debería evitar exponerse en exceso. La sobreexposición podría convertirse en un arma de doble filo y desmovilizar a las franjas de electores que el partido mayoritario ya tiene aseguradas,al menos según las encuestas.
Se trata de una estrategia clásica de los populares que,en cualquier caso,en esta ocasión también tiene que ver con la forma de ser de Cañete. «Soy muy espontáneo y digo siempre lo que pienso y a veces no soy políticamente correcto»,ha considerado el candidato. “A veces es mejor que no sea absolutamente como soy. Tengo que hacer un esfuerzo de contención y a veces llego casi al límite”,ha agregado. Y ese límite ha llegado a hoy a estas declaraciones sobre la superioridad intelectual. «Si soy yo mismo,me temo. Entraría a matar. Prefiero hacerlo de la manera en que lo he hecho»,ha insistido.
Durante el debate,Valenciano ya le afeó al candidato del PP declaraciones sobre el sexo contrario. La socialista se refirió a cuando,en 2000,el entonces ministro de Agricultura aseveró que a «los regadíos hay que manejarlos como a las mujeres».
La alcaldesa de Madrid,Ana Botella,ha sido una de las primeras en salir en defensa del exministro. «No he tenido la sensación nunca de que Cañete sea machista,siempre ha trabajado mucho con mujeres»,ha señalado en las Ser antes de añadir: «Nos tenemos que fijar en sus hechos. Y el hombre y la mujer somos iguales,tampoco hay que sacar las cosas de quicio. Hay que ver las acciones de Cañete a lo largo de los años. Hay que ver lo que ha hecho el PP por las mujeres. Creo que hay que fijarse en las políticas del PP sobre las mujeres. Lo más importante es tener empleo». Botella ha intentado justificarle: «Todos hacemos muchas declaraciones y unas son más afortunadas que otras».

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