Alojera

«No,no y no». Hasta tres veces negó el secretario de Organización del PSOE,César Luena,la posibilidad de una «gran coalición» con el PP,como reclaman sectores financieros y económicos de cara a los futuros escenarios electorales que puedan darse; y hasta la propia secretaria general del PP,María Dolores de Cospedal,que puso este martes el debate sobre la mesa.
La dirección del PSOE,según fuentes consultadas,se mantiene en que no contempla ningún acuerdo con los conservadores en ningún ámbito ─ni municipal,ni autonómico ni de Gobierno─,y se remiten a las palabras de Pedro Sánchez,cuando aún era candidato a la Secretaría General del PSOE. Entonces,el líder socialista dijo que no habría una «gran coalición» ni en Europa,ni en España con la derecha. «Y hemos cumplido en Europa,y lo mantendremos aquí»,afirmó un miembro de la dirección del partido. Según dichas fuentes,Sánchez no ha cambiado de opinión.
El debate surge,en buena medida,porque el secretario general del PSOE no tuvo una respuesta tan contundente en los desayunos informativos del diario Cinco Días del pasado lunes,ante una pregunta sobre esa posible «gran coalición». El líder socialista se limitó a decir que el próximo Gobierno será de acuerdos entre varias fuerzas políticas porque no habrá mayoría absoluta,nada más.
Pero fuentes muy cercanas a Sánchez mostraron su sorpresa por la interpretación a sus palabras y volvieron a ratificar que no está a favor de una gran coalición con el PP en ninguna circunstancia,ocurra lo que ocurra en las elecciones.
Luena,en declaraciones a Público,ratificó por cuarta vez que no está en las expectativas del PSOE un acuerdo con los el PP,»pero,además,no vamos a ser la llave del Gobierno de nadie,vamos a ganar en votos y en escaños»,aseguró el «número dos» del PSOE. También se mostró beligerante con esta posibilidad el candidato del PSOE a la Junta de Castilla-La Mancha,Emiliano García-Page,quien dijo que «la única coalición que contemplo con el PP es que Cospedal se vuelva por donde ha venido,por Madrid»,afirmó en referencia a su rival política.
El secretario de Organización llegó a decir que el PSOE se ha convertido en el partido «de moda»,porque unos quieren pactar con él y otros imitarle,en referencia a Podemos. Pero aseguró que los socialistas mantendrán su posición política sin titubeos y con sus propios planteamientos políticos.
Al PSOE,en el fondo,la situación le coloca en una posición difícil,pero también de centralidad política entre Podemos y el PP. Por ello,la dirección del partido cree que deben manejar un escenario complicado con cuidado,pero del que puede llegar a salir muy favorecido.
Su argumentario político,según ha podido saber Público,es muy claro y será el mensaje que lanzará el PSOE en los próximos días: «Sólo el PSOE puede ofrecer y garantizar un cambio seguro,que es el que necesita España,para crear buenos empleos y defender los servicios públicos,y a la vez impulsar los cambios políticos e instituciones inaplazables». Los socialistas,de momento,se colocan ahí. En esa equidistancia entre PP y Podemos,ambos rivales y ambos peligrosos. La duda está en si su posicionamiento les llevará al abismo o a La Moncloa. La partida parece que se la juegan a doble o nada.