“Son muchas las producciones agroalimentarias canarias vinculadas a nuestras costumbres y tradiciones; existen en todas las islas, y entre ellas está la Miel de Palma que se produce en La Gomera, un producto único de alto valor gastronómico, que debe ser reconocido y protegido”, asegura Casimiro Curbelo, líder de Agrupación Socialista Gomera (ASG).
Curbelo explica que con estas premisas se ha entablado una línea de colaboración con la Consejería de Agricultura del Gobierno canario, para buscar la fórmula que asegure reconocimiento y protección. Recuerda que las instituciones locales gomeras trabajan desde hace tiempo en la salvaguarda de este producto que es parte del patrimonio gomero y un sector productivo para numerosas familias.
Añade que “las producciones singulares que nos ayudan a distinguirnos y, sin lugar a dudas, constituyen el aliado perfecto para asegurar la satisfacción y fidelidad del turista, además de, claro está, mantener los sectores productivos tradicionales de nuestra economía”.
Recuerda que son muchos los guaraperos, que forman parte del tejido económico de La Gomera, una isla con un paisaje excepcional formado por más de 200.000 palmeras.
Apunta, además, que en los últimos tiempos la Miel de Palma ha sufrido contratiempos en su denominación, lo que dio lugar a la campaña “Yo soy miel de palma”, que suscribieron miles de personas, o a iniciativas como el documental “Bebida de los dioses”, que fue un “paso más” para aportar conocimiento en los ámbitos sociales de Canarias y el resto del mundo.
“Aún está vivo el debate por si se mantiene el nombre en Europa, de ahí la necesidad de aunar esfuerzos a favor de la que es una de las producciones más singulares de la isla”, concluye.