GOMERANOTICIAS.- Este lunes, 18 de enero se cumplieron veinte años de la primera emisión de la emisora municipal de San Sebastián de La Gomera, ‘Radio Ipalán’ impulsada por el Ayuntamiento capitalino a través del que fuera concejal de Cultura de esa Corporación, el fallecido Vicente Fenollosa.
A las siete de la tarde de aquel jueves, previo –como ahora– a los días más grandes de la fiestas en honor al Patrón de la Villa se celebró un acto oficial convocado por el alcalde, Ángel Luis Castilla al que asistieron las primeras autoridades civiles, militares y eclesiásticas de La Gomera, que en su mayoría fueron entrevistadas en las ondas a través del dial 107.7.
Radio Ipalán, se mantuvo operativa durante diecinueve años seguidos de forma ininterrumpida, recibiendo en sus pequeños estudios ubicados en la Avenida Colón de la capital insular, que posteriormente fueron parcialmente remodelados importantes personajes de la vida política, cultural, social y deportiva de la sociedad en general.
Fueron también muchas las voces que durante casi esas dos décadas dirigieron programas tanto desde el punto de vista de la locución como de la técnica. Muchos de ellos aportaron horas de programación en otras emisoras como la también desaparecida Radio Insular de La Gomera.
Radio Ipalán está ahora en silencio. Desde hace ya algunos meses no emite programación en directo, aunque según se ha informado a Gomeranoticias.com recientemente por parte de los actuales responsables municipales, eso no significa un cierre definitivo. «Se trata de buscar formulas que den la posibilidad de que se reconozca los derechos como trabajadores a una mínima plantilla para dar comienzo a las emisiones» afirman.
Mientras tanto, su sonido se echa en falta en la sociedad local. Sus tertulias e informaciones, sus programas musicales y también deportivos marcaban el día a día de todo aquello que acontecía. Una Ley injusta que obliga a los Ayuntamientos a delimitar quizá en exceso las prioridades, silenció a ‘La Voz de San Sebastián’, como decía de forma insistente la cuña publicitaria que sonaba día y noche entre programa o melodías e impidió mantener al personal que le daba vida y encima no dio posibilidad de alternativa.
Que sirva este artículo para recordar a todos los que han pasado por ahí, y recuperar también la memoria de su precursor, Vicente Fenollosa, un gran hombre y amigo, que se marchó quizá demasiado pronto pero dejó un gran legado por el que sigue siendo recordado. Estamos seguros, que allí donde esté, también extraña que su emisora guarde un silencio que es por muchos incomprendido.