La investidura fallida del candidato socialista Pedro Sánchez supone una mala noticia para el 48% de los españoles y buena para el 36%, según un sondeo realizado por Metroscopia la misma tarde de la votación. Lo lamentan los votantes del PSOE y de Ciudadanos pero también el 50% de quienes apoyaron a Podemos, que desaprueban el voto negativo al socialista. El 80% cree que el tiempo del líder del PP, Mariano Rajoy, ya ha pasado.
Quienes en mayor medida lamentan el fracaso de Pedro Sánchez son los votantes de PSOE y Ciudadanos (90% y 54%, respectivamente), que suman 130 escaños cuando la mayoría absoluta está fijada en 176. Pero resulta destacable que se sientan decepcionados la sexta parte de los votantes del PP y, sobre todo, la mitad de los de Podemos. El 42% de los primeros y el 45% de los segundos habían indicado ya, antes del inicio del debate, su deseo de que sus respectivos partidos al menos acabaran absteniéndose en la votación final. Y no lo hicieron.
Los españoles tienen claro que Podemos y PP son los responsables prácticamente exclusivos de esta “mala noticia”. Estas dos formaciones son percibidas como las que en mayor medida han dificultado —en vez de facilitar— las negociaciones para la configuración de un nuevo Gobierno. En cambio, la ciudadanía cree que PSOE y, sobre todo, Ciudadanos, son los que más se han esforzado por buscar puntos de encuentro y propiciar un acuerdo más amplio. Así, mientras que un 73% atribuye el desacuerdo final a Podemos (38%) o al PP (35%), solo un 17% culpa del mismo al PSOE (15%) o a Ciudadanos (2%). Inversamente, un 64% reconoce a Ciudadanos (38%) y PSOE (26%) un talante negociador que, en cambio, solo un 17% percibe en PP (9%) o Podemos (8%).
El fin de la era Rajoy
En la distribución de culpas que efectúa el conjunto de la ciudadanía coinciden los propios votantes de PP y Podemos, entre los cuales el 80% y el 82%, respectivamente, atribuye, en desigual medida, a estas dos formaciones ese resultado final que la mayoría considera una mala noticia.
Desde hace semanas, los líderes de PP y Podemos (Mariano Rajoy y Pablo Iglesias) son, regularmente, los peor evaluados. En el caso de Rajoy el diagnóstico general es ahora particularmente negativo: el 80% de los españoles cree que su tiempo ya ha pasado y que procede su relevo por un nuevo líder. Esa cifra alcanza además casi a la mitad de los votantes del PP. Un 47% de ellos da por acabada la era de Rajoy al frente del PP. Y resulta muy llamativo el hecho de que esa cifra haya aumentado hasta diez puntos porcentuales entre el día de la víspera del debate de investidura y el día siguiente, cuando pudieron escuchar y valorar la intervención del presidente del Gobierno en funciones desde la tribuna del Congreso.
En cuanto a Iglesias, cabe entender como un aviso por parte de sus votantes el hecho de que la mitad de los mismos evalúe negativamente el resultado final de este intento de investidura. Hasta un 45% de ellos había mostrado su deseo de que, como mínimo, Podemos se abstuviera ante la investidura de Sánchez.