La Consejería de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad del Gobierno de Canarias está trabajando en la creación de una brigada forestal canaria que pueda atender las emergencias por incendios en todas las islas, según ha anunciado la responsable del área, Nieves Lady Barreto.
La consejera realizó hoy martes una visita oficial a isla de La Gomera acompañada por la viceconsejera de Medio Ambiente y Seguridad, Blanca Pérez; la directora general de Protección de la Naturaleza, Sinesia Medina, y la directora de la Agencia de Protección del Medio Urbano y Natural, Ana Batista.
Nieves Lady Barreto y su equipo visitaron la helisuperficie del acuartelamiento del Ejército de Tierra donde tiene su sede de operaciones el nuevo helicóptero multifuncional destinado a La Gomera, acto en el que también estuvo presente el presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, junto a los alcaldes de Valle Gran Rey, Ángel Piñero; de Vallehermoso, Emiliano Coello; de San Sebastián, Adasat Reyes, y de Hermigua, Pedro Negrín.
Nieves Lady Barreto destacó que ésta era una reivindicación histórica de La Gomera que el Gobierno ha hecho realidad autorizando recientemente un gasto de 2,6 millones de euros para que la aeronave permanezca en la isla durante los meses de máxima afluencia de visitantes (de mayo a octubre), prestando servicios de atención en emergencias, protección civil y vigilancia.
Por su parte, el presidente del Cabildo agradeció la «sensibilidad» del Gobierno de Canarias, que «ha permitido a los gomeros contar, después de 16 años, con este helicóptero reivindicado por todos los sectores sociales y políticos de la isla. El presidente manifestó, igualmente, su confianza en que, más adelante, la aeronave pueda permanecer en La Gomera todo el año.
En su visita, Nieves Lady Barreto y su equipo también tuvieron la oportunidad de conocer de primera mano cómo se han rehabilitado los terrenos del vertedero de Arure, una vez que se ha sido clausurado y sellado.
El Gobierno de Canarias invirtió en esta obra 319.904 euros para dar cumplimiento a los requerimientos de la Unión Europea. Los trabajos consistieron en la clausura del vertedero y la restauración paisajística de la zona con la plantación de especies propias de la zona en un área de 4.000 metros cuadrados.