Sí se puede en Valle Gran Rey ha presentado una moción que intenta evitar que en las campañas de control de plagas de roedores se tomen todas las medidas prescritas para evitar que las mascotas domésticas y las especies de aves rapaces sean afectadas por los venenos utilizados.
«Esta moción se originó después de que una vecina se pusiera en contacto con nosotros para comunicarnos el envenenamiento y la muerte de su perro por ingesta de algún tipo de sustancia anticoagulante que le provocó fuertes hemorragias, y precisamente los anticoagulantes son los productos que se suelen aplicar para el control de ratas y ratones» explica Guzmán Correa, portavoz y concejal de Sí se puede en el Ayuntamiento de Valle Gran Rey.
Desde Sí se puede se aclara que en ningún caso esta moción pretende limitar o suspender las campañas de control de poblaciones de ratas y ratones en el municipio, sino que cuando se hagan estas campañas se aplique la normativa.
Para Guzmán Correa, «es obvio que controlar las poblaciones de ratas y ratones se hace necesario con el fin de evitar problemas ambientales, económicos y de salud pública. Hay que recordar que estas especies exóticas se encuentran entre los factores más importantes que causan la desaparición de la biodiversidad autóctona. También ocasionan graves daños económicos en la actividad agrícola gomera, y pueden provocar potenciales perjuicios en el sector turístico al ser animales que provocan fuerte rechazo social al estar relacionados con problemas de sanidad e higiene».
Sin embargo, desde la formación ecosocialista se insiste que estas campañas se pueden hacer sin poner en riesgo al resto de la fauna, tanto doméstica como silvestre, si se aplican una serie de prescripciones técnicas.
«Utilizar portacebos, etiquetarlos para informar sobre su contenido y sobre quién hace los tratamientos, realizar un seguimiento de la efectividad, enterrar los cadáveres de los roedores localizados y señalar con carteles las zonas donde se efectúan los tratamientos son medidas muy sencillas que pueden aminorar los envenenamientos secundarios, pero que no se realizan normalmente a pesar de que la normativa lo indica» señala el portavoz.
La moción también pretende que se desarrolle, a nivel municipal, un programa de actuación contra el uso ilegal de cebos envenenados con el objetivo de prevenir y disuadir de su uso, perseguir el delito, formar a los agentes de la autoridad y a los trabajadores municipales en medidas a adoptar en caso de sucesos de envenenamientos asociados a estas prácticas.
Desde el comité local de Valle Gran Rey se señala que, en el municipio, con demasiada frecuencia, se dan envenenamientos de animales domésticos por el consumo de venenos agudos a través de cepos, hecho absolutamente penado en España.
«Todavía, rastreando en Internet, aparecen artículos que unen el nombre de Valle Gran Rey con el envenenamiento masivo e indiscriminado de mascotas: en abril de 2004 se denunció en los medios la aparición de una veintena de cadáveres de perros y gatos, y el uso de cepos de carne envenenada. Estos hechos no fueron esclarecidos y colocan en muy mal lugar a nuestro municipio en lo referente al respeto de los animales domésticos» finaliza su intervención el portavoz del comité.