La encuesta preelectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), hecha pública este jueves por el organismo dependiente del Gobierno central horas antes del pistoletazo de inicio de campaña, pronostica en Galicia una victoria muy holgada para el PP de Alberto Núñez Feijóo. El sondeo otorga a los populares el 25-S una estimación de voto del 44,9% y entre 40 y 41 diputados, lo que supondría rebasar con entre dos y tres representantes el mínimo de 38 que necesitan los conservadores para retener sin problemas el poder que ostentan en la Xunta desde 2009. Feijóo salvaría de esta forma la única mayoría absoluta del PP en una comunidad autónoma y lo haría además sin apenas desgaste con respecto a 2012, cuando se coronó con 41 diputados y un 45% de las papeletas.
En la lucha por la segunda plaza, el CIS registra un empate técnico entre el PSdeG-PSOE y En Marea, con un porcentaje de voto idéntico (19,9%), que no permitiría un gobierno alternativo al de Feijóo.. El partido apoyado por Podemos, Anova y Esquerda Unida y que presenta como cabeza de cartel al exjuez Luís Villares lograría un número de asientos en el Parlamento gallego de entre 15 y 17, mientras que los socialistas se harían con 16. Este resultado significaría para la formación del puño y la rosa y su candidato a la Presidencia, Xaquín Fernández Leiceaga, un retroceso de dos escaños con respecto a los resultados de hace cuatro años.
El BNG que lidera Ana Pontón bajaría, según el CIS, de siete a dos escaños, sin lograr frenar la decadencia electoral que ha llevado a esta formación a quedarse sin representación en el Congreso de los Diputados después de 20 años. La posibilidad de que Ciudadanos entre en el Parlamento gallego queda en el aire. El CIS le otorga a la candidatura de Cristina Losada entre 0 y 1. Fuera de la Cámara se quedaría la otra opción nacionalista de la campaña, Compromiso por Galicia, una fuerza nacida como Anova de una escisión del BNG y que optó por descolgarse de En Marea, la candidatura impulsada por las mareas municipales.
El PP es el partido más votado en todas las provincias, aunque en la de Pontevedra, con diez escaños, se vería superado por las fuerzas de izquierda: PSdeG, 5; En Marea, 5-6, y BNG 1.
La encuesta, que se realizó con 3.454 entrevistas entre el 29 de agosto y el 2 de septiembre, antes de que se conociera el caso Soria o que Mariano Rajoy fracasara en la segunda votación de investidura, refleja que el porcentaje de electores que aún no ha decidido a quién votará el 25-S es del 35,8% y sitúa las dudas de los ciudadanos fundamentalmente entre PSdeG y En Marea, seguido de cerca por el dilema PP/PSdeG. El CIS dibuja un electorado que mayoritariamente se sitúa en la izquierda (28%). Las siguientes opciones más numerosas son el centro (17,2%), el centroizquierda (16,6%), el centroderecha (14,3%) y la derecha (11,6%).
Con Feijóo al frente, el PP ha dominado el Parlamento gallego en esta última legislatura frente a una oposición fragmentada. Los 41 escaños (el 45,79% de los votos) que los populares alcanzaron en 2012 otorgaron a Feijóo una holgada mayoría absoluta frente a un PSdeG diezmado por sus batallas internas que se mantuvo liderando la oposición con 18 escaños (el 20,61% de los votos).
Tras los socialistas, la coalición de izquierdas, AGE, integrada por los nacionalistas de Xosé Manuel Beiras escindidos del BNG y Esquerda Unida, irrumpió en la Cámara gallega con nueve diputados (un 13,90%). El BNG sucumbió al primer experimento de la candidatura unitaria de la izquierda y se quedó relegado a la última posición, con siete parlamentarios (un 10,11%). No obstante, las fricciones vividas en el seno de la coalición electoral provocaron la fuga de tres de sus diputados al Grupo Mixto y dejaron a los de Beiras en una posición parlamentaria debilitada.
Feijóo es ahora el único candidato que repite en la carrera electoral que arranca esta noche. AGE se ha unido en al partido instrumental En Marea junto a Podemos, mientras que PSdeG y BNG han renovado líderes y candidaturas.