Las amenazas de la Comisión Gestora que dirige Javier Fernández están causando el efecto contrario al que buscan. Cada vez más diputados del PSOE dicen estar dispuestos a votar ‘no’ a Mariano Rajoy en contra de lo que decidió el Comité Federal, que abogó por que los 84 parlamentarios socialistas hagan presidente a Mariano Rajoy.
«Cada vez estamos más firmes en nuestras convicciones y cada vez somos más», ha asegurado a EL MUNDO uno de los diputados que dice que mantendrá su compromiso electoral de no hacer posible un Gobierno de Rajoy.
De momento, parecen dispuestos a decir ‘no’ hasta 18 diputados socialistas. Entre ellos están los siete del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), los dos de Baleares, Sofía Hernanz y Pere Joan Pons, la aragonesa Susana Sumelzo, el propio Pedro Sánchez, que no se abstendrá, según fuentes próximas a él, la presidenta de la Gestora de Galicia, Pilar Cancela, la también gallega Rocío de Frutos, la independiente Margarita Robles y el diputado de Izquierda Socialista Odón Elorza.
Además, como ha podido saber EL MUNDO, ha decidido votar ‘no’ a Rajoy la también independiente Zaida Cantera, que va a anunciarlo hoy mismo, y están a punto de dar el paso la diputada por Palencia Mari Luz Martínez Seijo y la zamorana Mar Rominguera. Esto harían 18 deserciones.
En el caso de que la rebelión se quede ahí y la Comisión Gestora decidiera expulsarlos a todos del Grupo Socialista, el PSOE podría pasar a ser el tercer grupo de la Cámara tras el PP (134) y Unidos Podemos (67). Un PSOE con sólo 66 escaños sería desplazado por la formación de Pablo Iglesias de todos los debates e incluso de su puesto en el hemiciclo.
Fuentes socialistas apuntan que algunos diputados que habían anunciado que asumirían lo que decida el Comité Federal están ahora pensando en votar ‘no’ en conciencia dadas «las amenazas de los portavoces de la Gestora». Podría ser el caso de la asturiana Adriana Lastra, la murciana María González Veracruz o el valenciano José Luis Ábalos, como ha podido saber este diario.
Fuentes de los diputados críticos aseguraron a EL MUNDO que están estudiando impugnar las decisiones que está tomando la Gestora porque «los Estatutos no la facultan para tomar las decisiones que está tomando». Aún así, todavía no han decidido si irán a los tribunales.