La Gomera recibirá una inversión de 4,2 millones de euros, que se destinarán a la restitución de vallas de seguridad y protección de taludes entre San Sebastián y Vallehermoso, la vía que comunica Aure y Piedra Hincada, y la iluminación de los túneles de Valle Gran Rey. Así lo anunció hoy Casimiro Curbelo, portavoz de Agrupación Socialista Gomera (ASG), que defendió en el Parlamento la urgencia de las obras.
Curbelo recordó hoy las acciones pendientes en las carreteras de La Gomera y subrayó que La Gomera es la isla que más retrasos sufre en el Convenio de Carreteras Canarias –Estado, pero matizó que le consta el trabajo y la voluntad de la Consejería de Obras públicas, para alcanzar el equilibrio y la cohesión territorial de Canarias.
Celebró la adjudicación de la obra de emergencia para proteger taludes y restituir las vallas de seguridad por un importe de 2,2 millones de euros; las obras en la carretera dorsal, a las que se destinarán 1,8 millones, y los 200.000 euros para la iluminación de túneles, a los que se sumarán otros 100.000 euros para la electrificación.
Hizo hincapié en la conveniencia de exigir al Gobierno nacional recién formado que cumpla con Canarias, de modo que se cuente con los recursos económicos suficientes para acometer las obras necesarias en todas las islas; aclaró que en primer lugar se deben llevar a cabo las acciones incluidas en el Convenio de Carreteras Canarias-Estado, y continuar con la negociación de un nuevo convenio que incluya obras que se requieren.
Detalló que en La Gomera están pendientes, entre otros, la circunvalación del anillo insular para comunicar Vallehermoso con el Sur de la isla o la variante de Arure a Alajero y de Alajeró al aeropuerto, además de la segunda fase de la vía que va de Vallehermoso a Epina.
Se refirió también a la Curva del Silbo y la finalización de la Travesía de Hermigua, y preguntó por los presupuestos del próximo año, para insistir en la necesidad de invertir en La Gomera. “Tenemos que defender los intereses de nuestra tierra”, dijo Curbelo para luego insistir en la conveniencia de conseguir las partidas que corresponde a Canarias, y saldar la deuda de cientos de millones que se corresponde con los “repetidos incumplimientos”.
