La portavoz de Igualdad del Grupo Parlamentario Socialista, Ventura del Carmen Rodríguez, subrayó este jueves que la inserción laboral de las mujeres víctimas de violencia de género es clave para su autonomía económica y, por tanto, para su libertad de decisión. En el pleno de la Cámara, apostó por que la lucha contra este grave problema social se haga de manera transversal, atacándose desde todos los ámbitos posibles.
“Es necesario poner en valor el programa de inserción laboral puesto en marcha en septiembre pasado por la Consejería de Presidencia, Justicia e Igualdad, cuyo coste total asciende a 110.000 euros, lo que supone una inversión media de 2.037,03 euros por cada una de las víctimas”, dijo. Indicó que la violencia machista “destroza la vida de las mujeres que la sufren y la de sus hijos, quienes no solo viven un calvario que les deja secuelas psicológicas, emocionales o físicas de las que les es difícil recuperarse, sino que además, en muchos casos son mujeres que no tienen formación o no han tenido un empleo estable que les garantice una autonomía económica y una independencia personal”.
Señaló que esa dependencia económica suele ser una de las grandes dificultades para que estas mujeres tomen la decisión de salir de la situación de violencia o denunciar, sobre todo cuando tienen menores a su cargo. Recordó que el PSOE ha aprobado importantes leyes, como la de igualdad en 2007 y la de 2004 de medidas de protección integral contra la violencia de género, “herramientas en la lucha contra este problema social, actuando tanto desde la prevención como en la intervención directa con las víctimas”.
La parlamentaria del PSOE explicó que estas leyes, sumadas a las aprobadas en Canarias, regulan la protección de las víctimas y establecen una serie de recursos, junto con los itinerarios para el acompañamiento “desde que deciden pedir ayuda o denunciar hasta el momento en que estén preparadas para empezar a andar solas”. Añadió que la crisis económica y las altas tasas de desempleo femenino “nos dan datos de la feminización de la pobreza que sólo se rompe con políticas activas, con acciones o programas concretos con estas mujeres”.