“Sin duda, la magia de la Navidad está en los ojos de los más pequeños”. Con esta sincera frase, el alcalde de Vallehermoso, Emiliano Coello, trató de resumir los emocionantes momentos que se sucedieron este viernes en el municipio con la llegada de Papá Noel. Y es que los niños y niñas de la localidad demostraron, una vez más, que no hay mayor ilusión que descubrir, con sorpresa, a Santa Claus llegando para recibir las cartas y peticiones de estas fechas.
El dispositivo de llegada de Papá Noel comenzó bien pronto cuando los más pequeños se agolpaban en La Dama en torno a las 11.00 horas para recibir a Santa que, este año, no viajó acompañado de su habitual trineo, sino que lo hizo con una bicicleta dorada digna de su santidad festiva. Pero quizá los momentos más bellos de este recorrido se dieron en los barrios de El Cercado y de Alojera, donde los vecinos fueron los verdaderos protagonistas engalanando con globos y los populares gorros rojos los espacios habilitados para que Papá Noel recibiera a los más pequeños.
Pasadas las 20.00 horas llegó Santa Claus al casco al calor de las bengalas que los niños y niñas portaban y se sentó en un trono que le hizo recordar su gran palacio en el Polo Norte. De esta manera, Vallehermoso quiso simbolizar el valor que este municipio confiere a la Navidad y donde los verdaderos protagonistas son los más pequeños.
Previamente, y con la colaboración del Cabildo Insular, se celebró a las 19.00 en la Plaza de la Constitución un showcooking en el que se pudieron degustar platos elaborados con productos agroalimentarios de la isla. De esta manera, un cocinero gomero hizo las delicias de los presentes mientras esperaban la llegada de Santa. Todo ello confirmando la calidad y singularidad de la cocina local.
De esta manera, Vallehermoso quiere convertirse este año en ‘El pueblo de la Navidad’. Y para ello se han previsto numerosas actividades para que todos, tanto pequeños como mayores, disfruten de estos días de ilusión, esperanza y buenos deseos.