Venezuela se queda sin la posibilidad de informarse de manera independiente a través de la televisión. Las cableoperadoras han decidido dejar de transmitir la señal de CNN en Español a solicitud de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel). El régimen de Nicolás Maduro ha terminado de perder la paciencia con la señal, que se emite desde Atlanta y ha sido blanco de las críticas frecuentes de sus altos cargos, después de que la semana pasada transmitiera un reportaje en el que un exfuncionario destacado en la embajada venezolana en Irak denunciara la venta de pasaportes del país sudamericano a musulmanes sospechosos de tener lazos con el terrorismo.
En un comunicado, del que se hace el periódico El País, Conatel aseguró que la decisión de sacar a la planta de la parrilla de programación obedece a la sospecha de que sus contenidos transgreden la Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión. “Son contenidos que constituyen una agresión directa contra la patria venezolana”, agrega el comunicado.
“Tal procedimiento obedece al contenido que viene difundiendo la citada cadena internacional de noticias de forma sistemática y reiterada en el desarrollo de su programación diaria, de la cual se desprende, de forma clara y perceptible, contenidos que presuntamente constituyen agresiones directas que atentan contra la paz y la estabilidad democrática de nuestro pueblo venezolano, ya que los mismos generan un clima de intolerancia”, dice el comunicado.
Horas antes de consumarse la medida, la canciller Delcy Rodríguez había ofrecido una rueda de prensa con medios nacionales e internacionales para denunciar que CNN “inició una operación de guerra psicológica contra Venezuela”. Fue una manera de preparar el terreno para la decisión que venía y que se ha concretado en la tarde de este miércoles en Venezuela (medianoche en España).
CNN en Español se había convertido en una referencia del periodismo audiovisual independiente en Venezuela después de que en 2013 la combativa planta Globovisión fue vendida a capitales cercanos al chavismo. Las demás plantas nacionales han limitado su oferta de programas noticiosos o procurar no irritar al régimen bolivariano con la difusión de contenidos críticos. Junto a los portales extranjeros y nacionales de reciente creación, CNN era valorado como la última ventana a la libertad de informarse que tenía la nación sudamericana.
Esta es la segunda señal continental que no puede ser transmitida en Venezuela por órdenes del gobierno de Maduro. En 2014, en medio de las protestas lideradas por el dirigente opositor Leopoldo López, Conatel exigió a las cableoperadoras que sacaran del aire a la planta NTN24, cuya programación, furibundamente opositora, molestaba al gobierno.