La Audiencia de Palma ha acordado mantener la libertad provisional de Iñaki Urdangarin con las siguientes medidas: obligación de comparecer el día 1 de cada mes ante la autoridad judicial de su actual país de residencia (Suiza) y de comunicar al tribunal cualquier desplazamiento fuera de Europa o cualquier cambio de residencia, incluso temporal. De esta manera, las magistradas han desestimado la petición de la fiscalía de imponer una fianza de 200.000 euros. Contra el auto cabe recurso de súplica en el plazo de tres días.
El tribunal también mantiene la libertad provisional de Diego Torres, con prohibición de salir del territorio nacional, entrega de pasaporte y comparecencias en el Juzgado más próximo a su domicilio el día 1 de cada mes. También deberá comunicar cualquier cambio de residencia, incluso temporal.
La fiscalía ha argumentado esta mañana que el riesgo de fuga queda mitigado por el hecho de que el esposo de la Infanta cuenta con escolta policial. Sobre las diferencias de fianza entre los dos, fuentes del ministerio público han alegado que son proporcionales a la capacidad económica de cada uno. Las defensas de Iñaki Urdangarin y Diego Torres han argumentado, por su parte, que no existe riesgo de fuga, que ambos condenados han estado siempre a disposición del tribunal y que las penas por cada delito de forma individual son menores. Urdangarin y Torres solo han hecho uso de su turno para hacer suyas las palabras de sus abogados, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Baleares.
En la vista celebrada esta mañana han estado también presentes los representantes de la Abogacía del Estado y de la Comunidad Autónoma de Baleares, que se han adherido a la petición de la fiscalía. La Abogacía del Estado ha pedido medidas reales como la retención de ingresos o el embargo de sus ganancias.
La vista se ha desarrollado con la ausencia de un letrado de la acusación popular ejercida por el pseudosindicato Manos Limpias, cuya representante legal, Virginia López Negrete, anunció el miércoles que dejaba de actuar en nombre de la organización. La letrada comunicó, mediante un escrito remitido a la sección primera de la Audiencia Provincial, que dejaba la representación jurídica de Manos Limpias por la «absoluta falta de confianza» con su cliente y la existencia de «intereses totalmente contrapuestos».
La comparecencia celebrada en la sede del tribunal balear se ha realizado a puerta cerrada, sin la presencia de medios de comunicación que no han podido acceder al interior del recinto de la Audiencia Provincial. En la calle en la que se sitúa el edificio se ha desplegado un amplio dispositivo policial para contener a los curiosos que se han acercado al lugar y evitar la entrada de periodistas al recinto.