La consejera de Turismo del Gobierno de Canarias, Mariate Lorenzo, ha afirmado este miércoles en el Parlamento que el Plan Estratégico de Turismo saldrá a exposición pública este verano, se licitará antes de que acabe el año y ofrecerá los primeros resultados en el primer trimestre de 2018.
En una comparecencia parlamentaria sobre la revisión de la ordenación turística, ha dicho que antes de hacer una nueva gran ley del turismo, primero se debe hacer una «reflexión» sobre el modelo turístico, que en su opinión, debe orientarse al «crecimiento sostenible», adaptarse a las nuevas demandas de la «era digital», y lograr una «mejor coordinación» pública-privada.
«El plan estratégico es el preámbulo necesario para decidir el turismo al que queremos ir», ha comentado.
Ha dicho que aparte de los criterios ambientales, que ya están recogidos en casi toda la normativa, ha dicho que el Gobierno trabaja en nuevos criterios de sostenibilidad «económicos y sociales», más vinculados a la calidad del servicio, en la futura revisión de la ley de 2013, y ha avanzado un próximo plan de infraestructuras turísticas, pactado con las instituciones locales, que establece la posibilidad de rehabilitar hasta 623 unidades turísticas.
Miguel Jorge, del Grupo Popular, ha dicho que el Gobierno solo quiere poner «más pegas» a la actividad turística y mantener la «ilegalidad» en la actividad turística, porque no se quieren liberalizar los servicios.
Ha dicho que el Ejecutivo ha «perdido el rumbo» y no ha tomado decisiones en los dos años de Legislatura, y aunque ha valorado la apuesta por los planes de modernización, ha dicho que hay «varapalos jurídicos» y la redacción y aprobación es «exclusiva» del propio Gobierno.
Ha criticado también la exigencia de la autorización previa para abrir un complejo hotelero cuando ha sido anulada por los tribunales, y se ha preguntado «qué valor añadido» aporta al proyecto cuando ya hay licencia municipal.
Jesús Ramos, del Grupo Mixto (ASG), ha lamentado la «improvisación» del Gobierno de Canarias en la planificación del turismo, y ha exigido que se respete el modelo «de cada isla», para lo que ha demandado más participación de cabildos y ayuntamientos. «No podemos tener una norma que ignore la realidad de nuestro territorio», ha señalado.
El portavoz de NC, Román Rodríguez, ha reconocido que el turismo «va bien» en Canarias pese a que no se ha legislado con eficacia, poniendo como ejemplo la «inacción» con respecto al turismo vacacional, que tendrá «efectos irreversibles».
Asunción Delgado, de Podemos, ha criticado que el PP pida «barra libre» para construir donde se quiera y sin limitaciones, lo que demuestra que el «capitalismo de amiguetes campa a sus anchas en Canarias».
En su opinión, este modelo saca capitales en Canarias y solo deja en las islas «migajas» y precariedad.
Rosa Bella Cabrera, del Grupo Socialista, ha resaltado la apuesta del Gobierno de Canarias en la pasada Legislatura por la «renovación» hotelera con el fin de mejorar la competitividad, si bien ha reconocido que las medidas implantadas no han sido del todo eficaces. «Sin sostenibilidad la industria turística no será competitiva», ha comentado.
Nereida Calero, del Grupo Nacionalista, ha hecho un recorrido histórico por la ordenación del turismo en el archipiélago, un «entramado legal» con deficiencias que ha imposibilitado un buen desarrollo del sector, si bien también ha permitido «parar y reconducir» para mejor en algunas situaciones.
«Hay que aportar claridad administrativa y legal, evitando contradicciones», ha explicado.
