Coalición Canaria-Partido Nacionalista Canario considera que la situación actual es un fracaso colectivo. Ni el Gobierno del Estado ni el de Cataluña han estado a la altura de las circunstancias y lo que estamos viendo es una fractura social de imprevisibles consecuencias en la sociedad catalana.
El referéndum no ofrece garantías democráticas, pero se está votando igualmente. Esta situación arroja aún más incertidumbre al intento de los demócratas de tratar de gestionar el día después.
Coalición Canaria siempre ha considerado necesario más diálogo y consenso entre los partidos políticos sobre ‘la cuestión catalana’. El Estado y Cataluña deben buscar puntos de encuentro. La imposición de unos sobre otros no va a encontrar una solución fuera del diálogo político y menos aún actuando de manera unilateral.
La fuerza ha sido desproporcionada en algunos colegios electorales, una imagen que se buscaba y a la que ha contribuido el Gobierno de Rajoy. Por esa razón, lamentamos que los hechos que están teniendo lugar en Cataluña vengan a darnos la razón: el diálogo es el único camino para alcanzar acuerdos. Los incidentes ocurridos en la jornada de hoy trasladan al exterior una imagen equivocada y nada positiva de lo que debe ser la convivencia democrática y la estabilidad del Estado de Derecho que hemos ayudado a conseguir y mantener todas las fuerzas políticas y los ciudadanos en los últimos 40 años de democracia.
Los diferentes posicionamientos políticos que se han esgrimido durante los días previos y en la jornada del 1 de octubre, no deben hacernos olvidar que debemos buscar fórmulas para que sea posible el entendimiento y la vuelta a la senda del diálogo y el consenso.
Aquellos que han utilizado argumentos para el uso de la fuerza en uno u otro sentido solo han conseguido quebrar a la sociedad catalana, radicalizando aún más sus posturas.
Coalición Canaria pide al Estado y al Gobierno catalán la vuelta a la senda del diálogo
La situación actual es un fracaso colectivo. Ni el Gobierno del Estado ni el de Cataluña han estado a la altura de las circunstancias y lo que estamos viendo es una fractura social de imprevisibles consecuencias en Cataluña