El Cabildo de La Gomera aprobó el proyecto de protección y mejora del medioambiente. Se trata de un programa de actuaciones, al que se destina una inversión de 3 millones de euros y que será encomendado a una empresa pública para su ejecución. Así lo explicó el presidente insular, Casimiro Curbelo, quien avanzó que “este proyecto viene unido a la creación de 230 nuevos empleos para poder ejecutar las líneas de trabajo fijadas”.
Curbelo detalló que se ha hecho una planificación acorde a las necesidades medioambientales de la Isla y en la que tiene cabida la limpieza, acondicionamiento y restauración ambiental de senderos, barrancos y núcleos poblacionales, “prestando especial atención a la afección paisajística, la prevención de incendios y el buen estado de espacios públicos”, apuntó.
El presidente gomero hizo hincapié en los trabajos de conservación de senderos, que permiten la adecuación de más de 200 kilómetros de la red con tareas de retirada de vegetación, reparación de desniveles, junto a la colocación de vallas y señalética. “Esta es una acción estratégica en una Isla en la que sus senderos son un atractivo recurrente para turistas y residentes, por lo que el buen estado de ellos es prioritario”, señaló.
Las mismas actuaciones se repetirán en los márgenes y firmes de las pistas forestales, a lo que se sumará la reparación de baches, muros y la limpieza de cunetas. Simultáneamente se retirarán residuos vegetales y urbanos, priorizando su transporte y gestión. En este sentido, Curbelo reiteró que estas pistas tienen “una función relevante en las comunicaciones dentro de espacios naturales y en los operativos de prevención de incendios”.
Las mejoras medioambientales estarán acompañadas de trabajos de repoblación en áreas de monteverde para así minimizar la erosión del terreno y contribuir, en algunos casos, a la recuperación de zonas afectadas. “Esta es una medida que ya se ha hecho en anteriores ocasiones y está diseñada para actuar en zonas donde el rebrote de los árboles no ha sido el suficiente”, detalló Curbelo.
El proyecto contempla la continuidad de los tratamiento selvícolas, con un enfoque preventivo para la gestión de masas forestales, la creación de trochas y la retirada de residuos vegetales de alta combustión. Además, se realizarán tareas de limpieza y gestión de especies invasoras en cauces de barrancos, unido a la recogida selectiva y gestión de residuos urbanos depositados en estas zonas.