La Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro,Ashotel, considera un error la propuesta anunciada por el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, de imponer una tasa al sector del alquiler de coches, al tiempo que considera que la presión fiscal que afecta al sector turístico es suficiente. El presidente de Ashotel, Jorge Marichal, califica de “mala idea” esta iniciativa que irá a pleno este viernes en el Cabildo tinerfeño, “igual que vemos mal la propuesta de tasa turística que defienden algunos partidos y organizaciones para gravar las pernoctaciones en los hoteles”. “Creemos que el sector turístico en su conjunto y las diferentes actividades que lo integran, entre ellas el alquiler de coches y el alojamiento hotelero y extrahotelero, está suficientemente gravado y contribuye de forma notable a las arcas públicas”, explica Marichal, quien añade que desde Ashotel se entiende que la clave reside en “gestionar más eficientemente lo que se recauda, en vez de recaudar más”.
Según el último informe de Impactur Canarias 2016, el sector turístico contribuyó a las arcas públicas con 2.123 millones de euros procedentes de impuestos directos e indirectos. Además, con un gasto turístico en las Islas que superó en 2017 los 4.586 millones de euros y con un tipo impositivo que en 2012 subió del 5% del 7% de IGIC para este sector, la Administración pudo recaudar 321 millones de euros de todas las actividades que componen el gasto en destino (alojamiento pagado en destino, alimentación y bebidas, transporte local, actividades recreativas, culturales y deportivas, compras y otros gastos como salud o farmacia, entre otros). Ese incremento impositivo al 7% se ha traducido en 2017 en casi 100 millones de euros extras anuales de recaudación.
Asimismo, los últimos indicadores turísticos ponen de manifiesto que Canarias asiste a uncambio de ciclo en el volumen de turistas y pernoctaciones y se prevé que 2018 pueda cerrar con entre un 4% y un 6% menos de turistas, debido a la normalización del flujo que provoca la recuperación de otros destinos competidores del arco mediterráneo como Turquía, Túnez o Egipto. Además, la incertidumbre del panorama brexit sobre el turismo inglés, el principal mercado emisor en las Islas, contribuye también a ese futuro comportamiento que apunta a que Canarias cerrará 2018 por debajo de los 16 millones de turistas. “Esto no es motivo de alarma, pero sí un toque de atención para que sigamos trabajando en nuestro destino”, apunta Jorge Marichal, quien añade que “todo aquello que reste competitividad al destino, como esa propuesta de tasa turística o tasa al alquiler de coches, viene a restar en vez de sumar”.