La Consejería de Educación y Universidades del Gobierno de Canarias aplazará la implantación del proyecto de introducir la práctica de videojuegos en las aulas como actividad extraescolar para «buscar consenso» político y social en torno a la iniciativa tras las críticas que ha recibido, según ha anunciado hoy.
Iniciar un proceso
Promover un proceso “que permitirá aportar datos, estudios y detalles de un proyecto positivo para la educación canaria, en un clima de diálogo y no de enfrentamiento» como el que ha generado hasta ahora, y del que dan fe el rechazo de todos los partidos de la oposición y la constitución de una plataforma de docentes y otros agentes sociales contrarios a la idea, es el objetivo de la medida, avanza el Ejecutivo en un comunicado.
En él se insiste en que el desacuerdo de partidos y sectores de la comunidad educativa con ese proyecto es «fruto en muchos casos de que la información completa del mismo no ha llegado a toda la sociedad”, un mensaje que ha transmitido varias veces la consejera del área, Soledad Monzón, que en reiteradas ocasiones lo ha querido «defender» y ha asegurado que «seguiría adelante» pese a las críticas.
Algo que, de hecho, había vuelto a hacer con motivo de la inauguración oficial del nuevo curso escolar ayer mismo, solo un día antes de que su departamento haya dado a conocer hoy la decisión de paralizarlo.
Modificación de la Ley Canaria de Educación
Decisión que, según se expone en el escrito, está motivada por el propósito de «evitar que se modifique la Ley Canaria de Educación no Universitaria», ante el temor de que los partidos de la oposición podrían optar por ello como fórmula para impedir la iniciativa del Ejecutivo, que gobierna Coalición Canaria pero en minoría.
Educación subraya, en cualquier caso, que espera que el debate que planea impulsar «permita dar a conocer en profundidad sus motivaciones y las ventajas para el alumnado que juega con asiduidad y para sus familias».
Y, como fórmula para lograr todos los propósitos expresados, destaca que valora «la nueva propuesta del Partido Popular, que se suma a las de diálogo y consenso de la Agrupación Socialista Gomera realizadas en el pasado pleno del Parlamento, de crear una comisión parlamentaria para ‘buscar el consenso para impulsar de manera eficaz el desarrollo de las competencias digitales en los centros escolares canarios’, en lugar de la modificación de la Ley Canaria de Educación no Universitaria».
Más allá del Parlamento
Además, la Consejería anticipa que también «extenderá el debate más allá del Parlamento, a las asociaciones de padres, al profesorado y a los colectivos sociales interesados en la materia», con el deseo de que «se obtenga la información real de la opinión del conjunto de la comunidad educativa».
Desde ese planteamiento, y en palabras de Soledad Monzón, se subraya: “En esta nueva etapa esperamos una amplia participación de las familias y del profesorado, que son quienes más tienen que decir sobre la conveniencia de acercar los videojuegos a los centros educativos para que se pueda enseñar a los alumnos la mejor manera de emplearlos y también sobre la mejor forma de hacerlo”.