La asamblea local de Sí se puede en Valle Gran Rey ha presentado una solicitud dirigida al alcalde donde se propone que en un pleno municipal se traten los problemas que provoca la construcción de la rotonda de Las Orijamas. “Queremos conocer porqué una obra que nadie pidió y que tiene un presupuesto de ejecución bastante alto, está provocando tantas molestias y contratiempos y porqué el gobierno municipal no se pronuncia al respecto” argumenta Guzmán Correa, portavoz y concejal de la formación.
Para Sí se puede, son notorias y públicas las múltiples molestias y deficiencias que para el vecindario y para quienes visitan Valle Gran Rey ocasionan las obras asociadas al proyecto de construcción de la rotonda de Las Orijamas. “Para empezar, el cartel informativo dice que la ejecución iba a ser de dos meses, pero las obras empezaron en julio de 2018 y no tienen visos de acabarse pronto” explica el portavoz, quien cree “que esto, que puede parecer una cuestión menor, es un indicativo de lo mal planificado que fue el proyecto”.
Desde la asamblea local de la formación ecosocialista se apunta como problemas más graves los efectos del corte al tráfico de la carretera de acceso a Las Orijamas y la parte alta de La Calera, las deficientes medidas de seguridad y accesibilidad para peatones que cruzan la zona de obras y los fallos que ha habido en el mantenimiento de los semáforos ubicados en la obra para regular el tráfico. “Una obra tan bien presupuestada no debería menoscabar un aspecto que entendemos fundamental que es la seguridad. También debería evaluarse por parte de las autoridades promotoras cómo está afectando el corte en el acceso a Las Orijamas y la zona del Picacho y El Chorro a las empresas ubicadas ahí” expone Correa.
Otro problema originado durante la ejecución de los trabajos son las frecuentes y molestas emisiones de polvo de cemento desde el silo de la hormigonera situada junto a la carretera GM-1 a escasos metros del centro de salud, la residencia de ancianos y el barrio de Las Orijamas. Para el portavoz, “una actividad tan molesta e insalubre como la asociada a la fabricación de hormigón debe estar más vigilada para evitar los efectos que ha provocado en demasiadas ocasiones la hormigonera asociada a este proyecto”.
También preocupa a Sí se puede el confinamiento en el que está quedando el sondeo de Las Orijamas de titularidad municipal, de lo que puede derivarse que los futuros trabajos de mantenimiento de dicho sondeo se vean dificultados. “Cuando haya que hacer trabajos en esta instalación, que ahora mismo es fundamental para el suministro de agua de la zona baja, se tendrán que hacer interrupciones al tráfico rodado, y supondrán dificultades técnicas y económicas que repercutirán negativamente en la gestión municipal” argumenta Correa.
“Creemos que todos estos problemas suponen motivo más que suficiente para que los representantes públicos del Ayuntamiento de Valle Gran Rey seamos informados de sus causas y nos podamos pronunciar al respecto ante la opinión pública y la ciudadanía de nuestro municipio” finaliza el portavoz.