AGLAYMA ecológica, la Asociación Gomera de Limpieza del Alma y del Medio Ambiente, creada el pasado mes de octubre, lleva desde entonces limpiando playas de difícil acceso por el litoral gomero.
Los socios fundadores de AGLAYMA, personas amantes de la belleza de la isla, de la naturaleza, del mar… quieren contribuir a que la Gomera esté limpia y cuidada, no solo para los caminantes, sino también para los que llegan por mar o visitan sus recónditas playas.
Ugo, el presidente de la asociación, es un hombre de mar enamorado de la Gomera a quien en sus ratos de ocio le gusta ir a coger olas. “Una de mis playas favoritas es La Sepultura, en Tamargada: cuando la ves desde arriba es impresionante, pero a medida que te vas acercando, te das cuenta de que está infestada de objetos y trocitos de plásticos, y es muy triste.”
“Todo el mundo conoce el acuciante problema de la basura que ahoga los océanos, la cuestión es qué hacer al respecto”. AGLAYMA ha decidido empezar su labor con un plan de emergencia de limpieza de playas.
“No basta con ser consciente y no ensuciar, hay que empezar a limpiar y también a evitar que llegue más basura”, declara Ugo. Pero su visión a largo plazo, cuando las playas estén limpias, es tener los recursos para actuar frente a la basura y contaminación procedente del océano. La asociación viene a sumarse al frente que lucha por frenar el desastre ecológico al que estamos abocados por nuestra inconsciencia de las pasadas décadas.
Los socios de AGLAYMA organizan cada dos semanas una salida en barco para recoger basura en alguna playa de difícil acceso. Estas actividades de voluntariado y ocio activo son valoradas muy positivamente por los participantes. Divertirse en buena compañía, disfrutar de la belleza del entorno y trabajar por una buena causa es la fórmula del éxito de las excursiones de la asociación. Ya sea por mar o por tierra, con pizza o barbacoa, con baño o con pesca, las batidas de limpieza de AGLAYMA son además buenas para el alma.
En su vertiente más espiritual la asociación organiza salidas de placer, en barco, al atardecer, para ver la puesta del sol, o la salida de la luna, o darse un baño en la oscuridad entre la bioluminiscencia marina.
AGLAYMA ecológica ha sido muy bien recibida por las autoridades que han elogiado la iniciativa y el esfuerzo y les han ofrecido su apoyo para seguir con “una labor encomiable”, un ejemplo de mantenimiento del entorno participativo, socialmente aglutinante, individualmente enriquecedor, y eficiente, que repercute positivamente en la imagen de la isla.
