El pasado 9 de marzo, un numeroso grupo de personas se dio cita en la sede local de Sí se puede en Vallehermoso para disfrutar de la proyección de “Viudas blancas. La otra cara de la emigración canaria a Venezuela”. Este documental, dirigido por Ana Pérez Pinto, Dailos Barco Machado y Estrella Monterrey, se rodó en 2012 entre las islas de La Palma y Tenerife. Tras su proyección, se generó un coloquio para abordar las realidades de la mujer rural desde una perspectiva de género.
Este encuentro estuvo marcado por la emotividad del documental, que hizo que todas las personas asistentes quedaran atravesadas de alguna manera por las historias escuchadas, generando un interesante coloquio donde se pudo escuchar diferentes realidades, desde variadas perspectivas, girando el acto entorno a la reivindicación del 8 marzo y centrando el debate en la realidad de la lucha de género desde el pasado, trayéndola al presente y planteando el futuro.
“Esta es línea en la que queremos trabajar. Generar espacios de cultura, encuentro y debate es clave para crear una propuesta de futuro para el municipio. Citando a Unamuno, “hay que crear lo que se cree”, dice Enekoiz Rodríguez Noda, portavoz de la formación asamblearia.
El documental nos acerca a un punto de vista no habitual en la historia de la emigración canaria a Venezuela, poniendo el foco en algunas de las mujeres de aquellos hombres que marcharon, sacudidos por un fuerte contexto de crisis social y económica en la postguerra civil española. La exquisita, pero dura cinta, nos muestra la realidad de muchas mujeres canarias que se quedaron a cargo de casas, hijos e hijas, terrenos, y cuyos maridos, en muchos casos nunca regresaron. Despojadas de todo derecho social, el documental nos adentra en la dura realidad que tuvieron que enfrentar muchas mujeres canarias después de 1939.
La formación ecosocialista agradece a todas aquellas personas que hicieron un hueco la pasada fría tarde del sábado para venir a compartir un rato en la sede y promete que seguirá apostando por la cultura como eje de transformación social. “Hemos llegado para quedarnos y para trabajar por transformar la realidad de un municipio que no vamos a permitir que siga en decadencia”, concluye Rodríguez.