Para los miembros del Grupo Mixto del Cabildo de La Gomera, “es incomprensible que el equipo de gobierno del Cabildo insular, conociendo la situación de nuestra juventud a nivel laboral, haya sido incapaz de elaborar un proyecto que favorezca la inserción de nuestros jóvenes en el mercado de trabajo. Una vez más demuestran lo poco que les interesa las problemáticas reales de la Isla, entre ellas la dramática cifra de paro”.
Según informan estos cargos públicos, las subvenciones del Gobierno de Canarias favorecían la inserción de los jóvenes parados en el mercado laboral.
El objetivo de las subvenciones pérdidas era desarrollar proyectos generadores de empleo, en colaboración con los Cabildos Insulares, entre los jóvenes mayores de 16 años y menores de 30 años inscritos en el Sistema Nacional de Garantía Juvenil.
A lo largo del presente año las cifras de desempleados pasaron de tener en diciembre del pasado año 1364 parados a ser 1827 las personas sin empleo en noviembre 2019. Es decir, un incremento del 25% en lo que va de año. En el caso de los parados menores de 30 años, objetos de las líneas de subvención, en La Gomera se ha pasado de 195 parados en diciembre de 2018 a 234 en noviembre del presente año.
El objetivo de los planes subvencionados era la mejora en la empleabilidad de los trabajadores participantes, fomentando ampliar las aptitudes y competencias profesionales de los jóvenes desempleados.
Para los consejeros llama mucho la atención que sea el Cabildo de La Gomera el único de Canarias que no presenta proyecto alguno, lo que dista mucho del tono de queja permanente que asume el presidente de la corporación respecto a la doble insularidad.
Para Ada García, “no entendemos como se está continuamente criticando que no se apoya a La Gomera y cuando salen líneas de subvención para una problemática tan dramática como es el paro juvenil se es incapaz de presentar proyecto alguno”.
Los consejeros recuerdan que eran objeto de subvención los planes que incluían la formación con el posterior compromiso de contratación, así como la formación en idiomas y en tecnologías de la información, la preparación para la obtención de certificados de profesionalidad, evaluación y acreditación de las competencias profesionales y el desarrollo de Escuelas Taller, Casas de Oficios y programas mixtos de empleo-formación.
Igualmente eran subvencionables los llamados programas de segunda oportunidad que están dirigidos a aquellos jóvenes que abandonaron de forma prematura los estudios,
Finalmente, la consejera, señala “en nuestra situación socioeconómica, con cifras tan importantes de paro, no deberíamos permitir dejar pasar este tipo de oportunidades para formar a nuestra juventud y favorecer que se inserten ene le mercado laboral. Es hora de quejarse menos y de aprovechar más las oportunidades que se ofrecen”.