La consejera de Turismo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Yaiza Castilla, anunció este martes en el Parlamento que su Departamento ha iniciado un estudio sobre los posibles escenarios del brexit y su repercusión no solo en el turismo, sino también en la industria y el comercio de Canarias.
A este respecto, manifestó que el estudio contemplará un análisis macroeconómico de mercados que dibuje los diferentes escenarios que generaría el brexit (pesimista, optimista y probables) y, en base a ello, definir qué acciones de contención y fomento se podrían realizar.
Yaiza Castilla realizó un balance desde que el pasado sábado 1 de febrero, después de casi cuatro años desde su votación por sus ciudadanos y ciudadanas, el Reino Unido abandonara formalmente la Unión Europea.
“Lamentablemente para todos los que defendemos la necesidad de una Unión Europea”, dijo, “el brexit es ya una realidad”.
La consejera informó de que el periodo transitorio, que acaba de comenzar y se prolongará hasta el 31 de diciembre de este año, se caracteriza por la continuidad de las relaciones entre Reino Unido y la Unión Europea y se establecerán las bases para la futura relación entre Reino Unido y la Unión Europea, que a priori deberán estar basadas en el principio de reciprocidad.
“Es decir, todo lo que Reino Unido acepte de los europeos, Europa aceptará de los británicos”, afirmó.
Sobre esta negociación se refirió a varios puntos que podrían afectar negativamente al turismo británico en Canarias, como son, los acuerdos de aviación para los que habría que garantizar la política de cielos abiertos con el Reino Unido y reciprocidad en la programación de capacidades aéreas en las compañías británicas y españolas/europeas.
Y la exención de visados para viajar. “Escenario bastante posible, como ya ha informado el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, para viajes de corta duración, como son los vacacionales”, manifestó.
Los acuerdos de asistencia sanitaria para la no necesidad de un seguro privado y el roaming de telefonía para no encarecer el uso del teléfono e internet en las vacaciones, son otros de los puntos de negociación.
“Son, desde luego, negociaciones que se desarrollarán a nivel europeo, y en algún caso, nacional, pero desde el Gobierno de Canarias y desde esta Consejería estamos muy atentos y vigilantes ante cualquier acuerdo que pudiera causar algún perjuicio a las Islas y presionaremos donde haga falta para salvaguardar nuestra primera industria, como es el turismo, y en la que el mercado británico ocupa la primera posición en cuanto a volumen de visitantes y facturación”, advirtió Yaiza Castilla.
La consejera recordó que “el Reino Unido supone aproximadamente un tercio del turismo en Canarias, con una facturación superior a los 5.000 millones de euros y Canarias representa el 27% del turismo británico en España y el 7% del turismo británico en el mundo”.
En este sentido, señaló que “dado que el turismo representa el 35% del PIB Canario, y el turismo británico es un tercio de los turistas que llegan a las islas, puede estimarse que el turismo británico en su globalidad aporta en torno a un 10% al PIB Canario”.
Crecimiento después del brexit del turismo británico
No obstante, cabe también recordar que el turismo británico ha crecido en los últimos años de forma espectacular en Canarias y lo siguió haciendo incluso después de que el referéndum de 2016 otorgara la mayoría a los partidarios del brexit y la libra se depreciase de manera inmediata en torno a un 15%.
“No sólo no dejaron de venir, sino que el número de turistas británicos creció ese año un 17%. Ello demuestra la magnífica relación que nos une. Los turistas británicos se encuentran en Canarias como en su propia casa, aunque con un clima mucho mejor”, manifestó la consejera.
Esta familiaridad con el destino es la que garantiza un flujo constante de británicos en las islas a lo largo de todo el año y nos permite confiar en que una vez el brexit entre en vigor, esta relación no se verá afectada mientras no se vean afectadas las variables macroeconómicas fundamentales: el crecimiento económico, el paro, la inflación y el tipo de cambio.
Solo en el caso de un deterioro significativo de estas variables o de la conectividad aérea, es cuando estimamos que la llegada de turistas británicos a Canarias podría reducirse.
Hablando de conectividad, las quiebras de las aerolíneas Monarch (octubre de 2017) y Thomas Cook UK (septiembre de 2019) son los acontecimientos que más han frenado la llegada de británicos a las islas, no el brexit.
En cualquier caso, Yaiza Castilla recalcó que ante el brexit “Canarias no ha estado en una posición de verlas venir, sino todo lo contrario: nos hemos estado preparando para afrontar las consecuencias de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea”.
La Consejería de Turismo, Industria y Comercio está llevando a cabo acciones de apoyo al sector y de defensa de la imagen y la notoriedad de la marca de las Islas Canarias a corto y medio plazo.
Asimismo, desde Turismo de Islas Canarias se está trabajando intensamente para revertir el descenso de conectividad entre ambas regiones con el objetivo de que ése no sea un obstáculo para que los británicos continúen disfrutando de las islas.
Precisamente, las perspectivas para la temporada de verano son positivas con el crecimiento de Jet2 (+21,6%), TUI (+9,5%), Easyjet (+16,2%), British Airways (+8,8%) y Wizzair (que por primera vez tendrá programación en verano desde Reino Unido hacia Tenerife y Gran Canaria).
Por el lado de la demanda, el periodo transitorio del brexit que acabará el 31 de diciembre próximo garantiza que todo siga como hasta ahora y, por tanto, la demanda de viajes a las islas no debería verse afectada negativamente mientras la libra se mantenga fuerte y la economía también
Tal es así, que ya el principal grupo turístico británico y responsable del 40% de los turistas de este país en las Islas, Jet2, ha programado para la temporada de invierno 2020/2021 un 7% más de plazas con Canarias que en la actual temporada de invierno.
Dos millones de euros en promoción con Reino Unido
Por otro lado, desde la Consejería de Turismo se está intensificando la actividad promocional en Reino Unido con una inversión cercana a los 2 millones de euros.
Además de acciones y campañas destinadas a los mercados clave, en las que se ha ampliado la inversión para el mercado británico, se ha desarrollado una campaña específica a partir del contexto concreto del brexit.
Bajo el concepto ‘pase lo que pase seguiremos siendo amigos’ (“Whatever happens, friends will be friends”), se apela a la histórica vinculación entre Reino Unido y las Islas, ya que la preferencia de este mercado por las Islas no tiene que variar en lo esencial.
La campaña se ha desarrollado en noviembre y diciembre pasado en más de 250 medios digitales británicos, incluidos los principales periódicos y 40 portales de viaje, junto a numerosos contenidos publicados en redes sociales y otros soportes digitales.
Pero, además, coincidiendo con la salida definitiva de la UE, el pasado 31 de enero, Turismo de Islas Canarias ha intensificado su presencia con una campaña adicional en Instagram y Facebook estos días, con el mismo mensaje insistiendo en que ‘algunas cosas puede que cambien pero otras nunca lo harán’.
Pese a que el nuevo marco de relación con los británicos es objeto de negociación a nivel institucional europeo, y en algún caso, nacional, y que las competencias de Canarias al respecto son escasas, la consejera de Turismo, Industria y Comercio está propiciando encuentros tanto con el Gobierno central, de cara a recalcar la importancia de los acuerdos y/o medidas transitorias en los aspectos concretos que más afectan a Canarias y con el Gobierno británico a través de su representante en España “para ofrecer nuestra colaboración y prever situaciones negativas que puedan afectar a sus súbditos en sus vacaciones en las islas”, indicó Castilla.
“Queremos tener una presencia continua y se han abierto hilos directos que nos permitan desde Canarias el acceso a información y adelantarnos a posibles incidencias, así como explorar y negociar posibles excepcionalidades a medidas que nos resten competitividad, dentro de las posibilidades que otorga nuestro Estatuto de Autonomía y nuestra condición de región ultraperiferica dentro de la Unión Europea”, concluyó.