El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres (PSOE), ha pedido este lunes que se entienda que el sector turístico y las regiones que dependen de él, como las islas, van a necesitar más apoyo en esta crisis, «porque la situación dramática, pero no igual de dramática para todos».
Torres ha participado este lunes en un encuentro por videoconferencia con la presidenta de Baleares, Francina Armengol, y la ministra de Industria y Turismo, Reyes Maroto, organizado por Nueva Economía Fórum, centrado en cómo ven los tres las perspectivas de reactivación del sector turístico en España.
Los presidentes de Canarias y de Baleares han coincidido en reclamar un apoyo diferenciado para los dos archipiélagos en las políticas públicas que se articulen para favorecer la salida de esta crisis, porque en ambos casos sus economías dependen del turismo.
Torres ha sido claro sobre este punto: los turistas, ha dicho, no van a regresar de inmediato en las cifras que el sector necesita para recuperar la normalidad, ni aun en el caso de que este verano se pudieran efectuar vuelos internacionales con cierta normalidad.
El sector turístico, ha subrayado el presidente canario, va a tardar en recuperarse y no solo dependerá de cómo se encuentren las islas o de cómo evolucione la pandemia en el resto de España, sino de la situación en los principales países emisores de viajeros.
Y al respecto ha recordado que en estos momentos los contagios de la Covid-19 siguen creciendo a un nivel importante en el Reino Unido, mientras que en Alemania se están poniendo en cuestión algunas medidas de desconfinamiento, ante el temor a un rebrote.
Otras comunidades, ha argumentado Torres, podrán activar casi de inmediato sus industrias si tienen materia prima disponible, pero eso resulta imposible para un sector que depende de la confianza.
«Ahora que tiene una debilidad evidente, no podemos olvidarnos de un sector que tanta riqueza ha aportado a nuestro país», ha remarcado Torres, que ha coincidido con Armengol que fue el turismo el que ayudó a España a salir de la recesión iniciada en 2008.
Por ello, ha pedido un apoyo específico del Gobierno de España y de la Comisión Europea al turismo, empezando por los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), que en este sector deben poder extenderse «todo lo que sea preciso» para que las empresas puedan retomar su actividad y volver a reabrir la planta hotelera.
Torres ha señalado que son los ERTE los que están salvando en el empleo en estos meses y los que están conteniendo las cifras del paro ante el enorme impacto del coronavirus, pero también ha subrayado el coste: el Estado, ha dicho, se gasta unos 4.500 millones al mes en sostenerlos, unos 350 millones solo en Canarias.
«Lo importante es que recuperemos pronto la normalidad, sabiendo que esto va a tardar. Todos tenemos que arrimar el hombro, aquí no hay nadie que no vaya a estar afectado», ha añadido.
¿Cuál será la apuesta de Canarias para intentar ofrecer un destino seguro al turista europeo conforme se vaya recuperando la normalidad en su país? «Controles y test en origen», es la fórmula que Ángel Víctor Torres ve en estos momentos como más viable.
De igual forma, ha insistido en reclamar al Gobierno central que se replantee los criterios de reparto del fondo de 16.000 millones de euros que va a poner a disposición de las comunidades autónomas para incentivar a la recuperación de la actividad económica.
Torres ha precisado que entiende que el grueso del gasto vaya a compensar el esfuerzo sanitario, pero también ha llamado la atención sobre la necesidad de «preservar el empleo y de procurar que la estructura social no se rompa», punto en el que ha recordado que Canarias tiene tasas de paro y pobreza por encima de la media.
También ha demandado que se tenga en cuenta el impacto que han sufrido y van a sufrir en los próximos meses aquellas comunidades autónomas con un régimen fiscal propio, lo que les hace más dependientes de los recursos que generan sus tributos.
Si la media de recursos propios en los presupuestos de las comunidades autónomas está en el 8 %, en Canarias esa dependencia es del 20 %, por lo que ello debe ser tenido en cuenta al repartir los fondos estatales de 16.000 millones, al igual que la condición de ultraperiferia.