El Gobierno central y las comunidades autónomas han acordado ampliar el uso de mascarillas y será obligatorio, además de en el transporte público, «en espacios cerrados y en la vía pública si no es posible garantizar la distancia mínima de seguridad de dos metros».
Esta medida ha sido acordada en el seno del Consejo Interterritorial de Salud, al que asisten el ministro Salvador Illa y los consejeros del ramo, y quedará regulado en una orden ministerial que se publicará «en los próximos días».
En un comunicado, la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias -que trasladó al Ministerio la solicitud para que todas las islas entren a la Fase 2- indicó que en el encuentro trataron la orden que «en breve» publicará el Ejecutivo central «con respecto al uso de mascarillas»
Las recomendaciones sobre el uso de las mascarillas han variado desde el inicio de la pandemia hasta la obligatoriedad que establecerá el Gobierno central. Al inicio de la crisis sanitaria, su uso se recomendaba sobre todo para el personal sanitario y pacientes con síntomas, si bien al comienzo escaseaba el material como reconoció el propio vicepresidente de la administración regional, Román Rodríguez.
De hecho, las autonomías, como Canarias, protestaron por no permitir que cada región pudiera pedir el material que necesitaba. Así, llegó el primer avión con escala directa desde China a Canarias para aportar equipos de protección individual.
En abril, el portavoz del Comité de Expertos que asesora al Gobierno canario sobre el pandemia de COVID-19, Lluis Serra, quien anunciaba que por esas fechas el Archipiélago alcanzaba el pico de contagios, reconoció que el uso de mascarillas es importante, pero «más para no contagiar que para no contagiarse». Sin embargo, consideraba que pedir a la población que las utilice cuando hay canarios que no pueden tener acceso a las mismas generaría un problema.
En mayo, el Gobierno central publicaba una orden por la que se establecía como obligatorio su uso en transportes públicos y, para ello, incrementaría la distribución de este material entre las autonomías. Así, las Islas repartieron medio millón entre la población.
Ahora, esta medida se ampliará en las calles y espacios cerrados ante ya que, desde hace unas semanas, y con la regulación de los precios, su accesibilidad está más garantizada que entonces. Este domingo, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, dijo que no precisaría exactamente cómo se llevará a cabo «hasta que no esté la orden cerrada», porque siguen «evaluándolo». Anunció que iba a debatirlo este lunes con las comunidades, y paralelamente «están los expertos trabajando».