El presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, planteó, este lunes, retomar las conexiones aéreas con la isla y normalizar las marítimas a partir del 8 de junio, fecha en la que el resto de Canarias pasarán a fase 3. “Tenemos que ir alcanzado la nueva normalidad de forma paulatina y ganar movilidad, después de casi tres meses con restricciones para frenar la pandemia”, aseveró.
Durante este tiempo, el tráfico marítimo con La Gomera ha caído de forma considerable, pasando de más de 4.000 pasajeros diarios a una media de 70 cada jornada. Mientras, el cese de las operaciones en el aeropuerto ha motivado la suspensión de sus rutas con Tenerife Norte y Gran Canaria.
La propuesta que plantea Curbelo incluye la disposición de un protocolo en origen con el que garantizar la seguridad sanitaria de los pasajeros. “Hace unas semanas adelantamos a Sanidad la idea de articular mecanismos de control que permitan la realización de pruebas, más allá de la temperatura o la desinfección que se aplica, ya que es la única fórmula de evitar riesgos durante la reactivación de la movilidad”, explicó.
El dirigente insular apeló a la responsabilidad en esta nueva etapa, en la que el contacto social debe cumplir con las medidas de distanciamiento y la utilización de mascarillas. “Tendremos que ir adaptándonos a la nueva normalidad. Ahora no sólo depende de aportar una pautas de convivencia, sino que las cumplamos. Ahí está la clave del éxito”.
Novedades de la fase 3
La Gomera, al igual que El Hierro, La Graciosa y Formentera accedieron desde este lunes a la fase 3 con la flexibilización de aforos en establecimientos comerciales y de restauración, lugares de culto y alojamientos. Además, los velatorios se podrán celebrar con un máximo de 50 personas en espacios abiertos y de 25 en recintos cerrados. Las bodas también se autorizan con un máximo de 150 personas al aire libre y 75 en espacios cerrados.
Financiación cabildos
Curbelo urgió, una vez más, a definir las medidas de compensación ante la pérdida de recursos del REF. “Sabemos que hay buena predisposición por parte del Gobierno de España, pero seguimos esperando a la concreción sobre el endeudamiento y superávit, aspectos fundamentales para redefinir las cuentas insulares ante la nueva realidad social y económica de las islas”.
“No entenderíamos desde las corporaciones locales e insulares canarias otra decisión, y mucho menos si tenemos en cuenta que nuestra comunidad autónoma ha sido siempre cumplidora con las exigencias económicas”, concluyó.