El portavoz y consejero de Presidencia del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, ha avanzado este jueves que el Ejecutivo regional prevé hacer cambios «necesarios y útiles» en las órdenes que regulan las normas de convivencia ante la pandemia del coronavirus y ha admitido que se plantean exigir las mascarillas «en algunas situaciones donde hoy no es exigible».
Pérez ha hecho este matiz después de subrayar durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que las mascarillas en Canarias «son obligatorias» cuando no se cumple la distancia de seguridad, admitiendo que «lo malo es cuando la gente se amontona». De todos modos, puntualizó que se trata de una cuestión que debe discutir el equipo de gobierno el próximo lunes tras una propuesta de Salud Pública.
«Es posible que en algunas situaciones donde hoy no es exigible la mascarilla, se establezca, no parece que en los lugares abiertos haya que generalizar la exigencia porque no se percibe. Lo que tenemos es que buscar la forma de actuar en los botellones, en las fiestas familiares«, ha apuntillado.
El portavoz del Gobierno de Canarias ha incidido en que «preocupa» el cumplimiento de las normas principalmente en espacios cerrados, celebraciones como los botellones y fiestas familiares, zonas en las que es donde «menos se cumplen las normas de higiene, el aforo», ya que en los espacios abiertos consideró que en general se cumple.
Por ello, subrayó que se quieren «mejorar» las normas y, si se puede, «simplificarlas» en cuanto a hacerlas «más claras, más elegibles y controlables» también para que los policías puedan tener «más facilidad» para hacer cumplir las normas. «Jóvenes, familias, recintos cerrados, esto nos preocupa mucho, más que salir a la calle y ver que de 100 personas, 4 no llevan la mascarilla», apostilló.
Finalmente, afirmó que tienen «muchas quejas» en el ámbito de la restauración en cuanto a que hay unas que cumplen y otras no.