La consejera de Turismo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Yaiza Castilla, mostró hoy su convencimiento con que en breve los países comiencen a levantar sus advertencias a los viajes a las islas, lo que llevará aparejado un aumento de las reservas de viajes a las islas para estos meses.
Castilla, que compareció esta tarde en pleno del Parlamento de Canarias, reconoció que la conectividad aérea con Canarias en octubre no está llegando ni al 40% de la que se ofertó en el mismo mes en 2019, a lo que se añade una muy baja ocupación de los vuelos. Y esto sucede, según sus explicaciones, porque la demanda turística está evolucionando al son de las decisiones sobre movilidad de los gobiernos, algo que los sistemas de reservas están registrando casi en directo. “Tan pronto hay anuncio de cuarentena se producen cancelaciones, mientras que la retirada de cuarentena es igual al aumento de reservas”.
Es algo que están teniendo muy claro los turoperadores, según dijo, de ahí que TUI, que prevé que en días o una semana Alemania levante la advertencia a los viajes a Canarias, “se haya aventurado con el proyecto piloto de reanudar conexiones con las islas, pocas, pero significativas por cuanto demuestran la confianza en Canarias como destino seguro.
La consejera regional recordó que Canarias cuenta con argumentos para que esta temporada de invierno que se inicia en noviembre sea un éxito, al ser el único destino de gran capacidad, conocido, de media distancia, con buen clima y con estándares europeos que podría acoger a la demanda potencial desde los diferentes mercados emisores.
No obstante, reconoció que hay factores que podrían dar al traste con todas las buenas expectativas, entre los que citó que continúe agudizándose la pandemia en los mercados emisores y que vuelvan a ponerse en práctica confinamientos de la población; que los ciudadanos europeos sigan las recomendaciones de sus gobernantes de no salir del país para mantener la pandemia bajo control; que el perfil del turista de invierno, de mayor edad y consecuentemente más expuesto y más temeroso de contagios, podría suponer una reducción de la demanda de viajes en esta temporada; y la nueva tendencia de la “vergüenza a viajar”, derivado de la presión social para que la gente no viaje y no propague el virus. En este sentido , dijo que se puede apreciar en las redes sociales cuando se comparten fotos de viaje como aumentan las críticas cuestionando la necesidad del mismo y tachándolo de conducta irresponsable.
Como contrapartida a estos elementos “que pueden llevarnos al pesimismo”, la titular de turismo en el Gobierno de Canarias añadió como positivo la menor restricción al turismo que puede derivarse del acuerdo de hoy en la Comisión Europea de recomendar a los estados miembros que basen sus limitaciones a los viajes dentro de la UE en función de la situación epidemiológica y de acuerdo a un código de colores por zonas (no por países).
No obstante, lamentó que la UE haya dejado en el aire en su recomendación de semáforo, y en el que en estos momentos Canarias estaría en ámbar, qué medidas implementar por cada país en función del nivel epidemiológico de la zona desde donde proceda el viajero. “Esperamos que esta propuesta, cuyo espíritu es no restringir la movilidad en el espacio Schengen y que las medidas que se apliquen ante el nivel de pandemia de terceros países sean proporcionadas y no discriminatorias, sea asumida por los estados, incluido España, de los pocos que no han establecido medidas para la entrada de viajeros de zonas de riesgo y eso que somos un país eminentemente receptor”, manifestó la consejera
Castilla también informó con ocasión de su comparecencia que en las últimas semanas se ha estado trabajando un protocolo de negociación base del Gobierno español con los países emisores, anunciado el pasado viernes, que, “aunque dista mucho de la propuesta que desde Turismo de Canarias hemos estado defendiendo, al menos es un avance después de meses pregonando en el desierto sobre los corredores con garantías de reciprocidad sanitaria, vía testeo de los viajeros”.
“Seguiremos, en cualquier caso, insistiendo para lograr aquello que todavía Madrid no ha entendido necesario para Canarias: y que es que no se excluya del testeo a viajeros a ninguna zona de riesgo y con esto me refiero a los que llegan de la Península; y el control en puertos y aeropuertos”, concluyó la consejera de Turismo.