Son muchas las ocasiones en las que no basta poner tierra de por medio, como dice la popular frase, para evitar un conflicto o alejarse de un problema al que no queremos o no sabemos cómo enfrentarnos y para muestra de ello, lo que está ocurriendo en nuestras fronteras con Marruecos, donde esta semana asistíamos perplejos a una ola de inmigración con el cruel objetivo de saldar una diferencia política con España.
Canarias lleva meses sufriendo una crisis migratoria que nos encoge el alma y ahora, Ceuta se suma a estas imágenes en las que se nos queda la mirada congelada al contemplar tanto sufrimiento, dolor y desesperación en las personas que llegan a duras penas a orillas españolas en busca de la paz y la felicidad prometida por el país vecino. Jugar con los sueños y las esperanzas de ocho mil personas sólo por presionar y tensar las relaciones con España es un acto inhumano que no debe repetirse, por lo que espero y deseo que el diálogo y el entendimiento se impongan a la insensatez para revertir este caos, en el que las principales víctimas son los civiles de un lado y de otro de la frontera.
Y en el camino de estrechar lazos entre países, también está la reactivación de la movilidad para los turistas. Esta semana se aperturó una nueva edición de Fitur. Un encuentro estratégico del sector turístico que supone el escaparate perfecto para hacer gala de los atractivos de Canarias. La vida vuelve poco a poco a la normalidad y son muchos los turistas que ya tienen preparado su equipaje para viajar, por lo que depende en gran parte de nuestras acciones promocionales que elijan nuestras Islas en el inmenso mapa de destinos vacacionales. Pero no nos engañemos, no sólo con una excelente estrategia de promoción lograremos encandilar a nuestros turistas, pues una gran parte de ello depende los datos epidemiológicos que cosechemos, por lo que nuestro mayor reclamo debe ser la seguridad en el destino.
En La Gomera podemos presumir de contar con unos muy buenos datos respecto a los índices de contagio y sin duda, ello supone el mayor valor que tiene ahora la Isla para liderar los destinos más demandados entre el mercado nacional, un hecho objetivo que no desmerece todas las singularidades naturales, culturales y gastronómicas que posee este entorno.
Pero si queremos recuperar de forma real los flujos turísticos para llegar a las cifras que nos acerquen a las que teníamos antes de que el maldito virus se colara en nuestras vidas, tenemos que poner en marcha el pasaporte sanitario europeo, el llamado certificado verde digital para permitir viajar a todas aquellas personas que garanticen un bajo índice de probabilidades de transmisión. Por ello, es del todo acertado que la UE tenga previsto su funcionamiento a partir del 1 de julio, gracias al acuerdo sellado entre los países miembros, lo que permitirá viajar con un simple código QR, poniendo orden, seguridad y sosiego a la incertidumbre actual.
De la recuperación del turismo dependen muchos factores. Está en juego nuestro PIB, que ha perdido 11.000 millones de euros a causa del parón motivado por la pandemia, está en juego el empleo de más de 347.000 familias y está en juego la tan ansiada recuperación económica. Sin duda, el sector tractor de otros sectores como es el turismo es esencial en nuestro tejido productivo, pero como hemos defendido desde Agrupación Socialista Gomera en más de una ocasión, es el momento idóneo para centrar más recursos y esfuerzos en la diversificación económica y que nuestras Islas dependan menos de los vaivenes turísticos y del exterior.
En este asunto, entre otros, tuve la oportunidad de incidir en un foro celebrado esta semana, que nos permitió departir con otras voces representativas de Canarias acerca de la situación actual de las Islas y los retos que tenemos que alcanzar a corto y largo plazo, entre los que la descarbonización ocupa un lugar destacado entre las metas a lograr. No podemos seguir dependiendo de los combustibles fósiles para iluminar nuestras vidas cuando tenemos al alcance de la naturaleza la energía que precisamos.
Desafíos como este, sumados al envejecimiento poblacional, la simplificación de la administración, la digitalización, la emigración y la reconstrucción económica y social son en los que tenemos que aunar todas nuestras fuerzas. No perdamos ni un minuto en debates vacíos que no conducen sino a fomentar el odio y los sinsabores de la sociedad, trabajemos desde ya por todos los canarios, nuestro Archipiélago lo merece.