En la vida, muy pocas cosas son predecibles en términos de salud. Sin embargo, para nadie es sorpresa el evidente deterioro que sufre un individuo con el paso de los años. Además, el daño que producen algunas enfermedades sobre los huesos, puede acelerar el proceso de fragilidad de los mismos.
Por tal motivo, la comunidad médica estima que dichos factores elevará el índice de fracturas en tan solo 4 años. El experto, Francisco D’Agostino, investigó el tema para ofrecer información de fundamento. Es imprescindible tomar medidas pertinentes e indagar en las opiniones de especialistas.
Una alerta del 27% que afecta al futuro
Las estadísticas demográficas han demostrado que la fragilidad que amenaza al sistema óseo, puede elevarse para el 2025. Desde 2010, el promedio de fracturas era de 3.5 millones, mientras que dentro de unos años será de 4.5 millones. El resultado establece un porcentaje de elevación en 27%.
La osteoporosis es una de las causas más comunes en el desgaste de los huesos que puede causar lesiones. Para aliviar sus efectos y mejorar las opciones del paciente durante el padecimiento, se requiere del apoyo de otras áreas. Por lo general, intervienen:
- Reumatólogos: pueden participar en el diagnóstico y tratamiento de inflamación de tendones o desgaste en los huesos.
- Geriatría: en pacientes mayores, la ayuda de expertos en enfermedades de la edad será pertinente.
- Rehabilitación: quienes pertenecen al área, proveen técnicas de tratamiento y métodos de alivio eficaces.
- Medicina interna: sus especialistas se encuentran capacitados para ayudar en el diagnóstico de afecciones en el sistema esquelético.
Medidas que planean hacer frente al problema
Algunas jornadas realizadas por especialistas en el área, han mostrado una actualización que permite tomar medidas. Muchas de ellas pueden ser empleadas en el presente y perfeccionadas para un futuro.
Organizaciones prestigiosas como la SEIOMM, la Sociedad Española de Fracturas Osteoporóticas y la Sociedad de Reumatología Española asistieron. Todas se encuentran de acuerdo en que los mejores métodos de prevención son:
No farmacológicos
Entre las investigaciones, opiniones y discusiones de los expertos, se concluye que puede prevenirse una fractura sin métodos farmacéuticos. Para ello, es necesario consumir calcio de manera natural, realizar ejercicios e ingerir Vitamina D (alimentos, exposición al sol). También, es preciso abandonar malos hábitos como el tabaquismo, alcoholismo, entre otros.
Determinación en los riesgos
Como parte de los cuidados de un individuo con fragilidad ósea, es vital que evite caídas y se mantenga acompañado. También, es preciso que regule el consumo de algunos medicamentos que no pueda abandonar (antipsicóticos, antidepresivos, etc.).
Retos del presente
Desde el pasado año, pacientes con enfermedades recurrentes se han visto aislados de la atención médica personal. El motivo principal es la presencia del Covid-19 y la saturación de los diversos centros de salud mundial.
Las consultas virtuales no suelen ser tan efectivas en el diagnóstico y rehabilitación de fracturas. Por tal motivo, muchas personas abandonan el tratamiento o se mantienen con alguno doméstico. La solución más efectiva ante tal problemática, ha sido la fusión de consultas por internet y presenciales.