El presidente del Cabildo, Casimiro Curbelo, ha expresado, este viernes, su respaldo al anuncio del Gobierno de Canarias sobre la implantación de medidas de control en los interiores de los establecimientos, fijando el certificado vacunal como una de las condiciones de acceso, que se compaginará con la presentación de una PCR o test de antígenos negativo para aquellos que no hayan recibido la pauta completa.
“Es evidente que el impacto de la quinta ola está siendo mucho más fuerte de lo previsto, y las variantes que han aparecido son más potentes en lo que a transmisión se refiere, por lo que las medidas deben ser acordes a esta realidad, y la propuesta del Ejecutivo es muy coherente en estos momentos, con una tasa diaria de contagios que supera los 600 positivos”, esgrimió Curbelo.
Además, hizo un llamamiento a la responsabilidad social “en un contexto donde nos jugamos la salud, pero también la reactivación económica de sectores estratégicos como el turismo, y que comienza a padecer las consecuencias del incremento en los niveles de alerta epidemiológica con anuncios de cancelación de rutas con países europeos como Holanda”, por lo que apeló al sentido común para no retroceder en los avances alcanzados con un nivel de vacunación que avanza “a buen ritmo” con más de 960 mil inmunizados en las islas.
En este sentido, Curbelo confió en que el recurso de casación presentado por Canarias ante el Tribunal Supremo se resuelva de forma favorable, y pueda implantarse el toque de queda en las islas que alcancen los niveles 3 y 4, porque de lo contrario “las herramientas de control que las administraciones públicas tienen se verán seriamente mermadas”.
Por último, insistió en mantener los esfuerzos en medidas que contribuyan a paliar las consecuencias sociales y económicas de la pandemia, especialmente, las dirigidas a la lucha contra la pobreza, la recuperación turística y la creación de empleo.