El Gobierno de Canarias ha presentado este jueves la Agenda 2030, con la que adapta los objetivos formulados por Naciones Unidas a su realidad con el propósito de que dentro nueve años las islas sean un lugar «más sostenible» en lo ambiental, pero también de mayor bienestar social.
Y, de hecho, la agenda contiene varios objetivos sociales a cumplir en nueve años expresados de forma clara, con cifras, porcentajes y plazos precisos, entre los que destaca reducir la proporción de población en riesgo de pobreza y exclusión a la mitad: del 36% actual (tasa más alta de España) al 17,5% en 2030.
O este otro, que rebasa el objetivo genérico de incrementar los niveles de empleo y de prosperidad de su gente para adentrarse en la justicia intergeneracional: rebajar a menos del 30% la tasa de paro entre sus jóvenes, que en este momento está por encima del 56%.
«Necesitamos ser la Canarias de esta Agenda», ha subrayado el presidente, Ángel Víctor Torres, quien ha insistido en que estos objetivos han sido trazados con una amplia participación de organizaciones políticas, sociales, empresariales, sindicales y medioambientales, para que el futuro del archipiélago se escriba en términos de «personas, prosperidad y planeta».
Para hacer públicos los compromisos que asume con esta Agenda, el Gobierno de Canarias ha escogido un lugar que considera que resume bien el enfoque con el que afronta el cambio que comportan: los Jameos del Agua, un tubo volcánico transformado por el arte de César Manrique en un lugar que respeta el entorno geológico, preserva varias especies endémicas y, al mismo tiempo, es un recurso turístico.
Un motor turístico dentro de la isla de Lanzarote diferente, ha enfatizado la presidenta del Cabildo, Dolores Corujo, que está gestionado por una empresa pública, con empleados «con condiciones laborales dignas» y que genera «beneficios públicos».
Objetivos de la ONU
Canarias ha adaptado los 169 objetivos de desarrollo sostenible definidos por la ONU en 2015 a la realidad de sus ocho islas para volcarlos en 316 metas, expresadas en un centenar de páginas.
Las islas quieren ser más sostenibles, ha remarcado Torres, y por eso se comprometen a que en nueve años todas las aguas que vierten al mar reciban antes tratamiento (hoy solo son tratadas el 20%), a que el 30 % de su consumo total de energía provenga de fuentes renovables (hoy solo es el 5%) o a que sus emisiones de gases de efecto invernadero caigan a menos de la mitad, de las 6 toneladas actuales por persona y año a menos de 2,5 toneladas.
El presidente de Canarias ha remarcado durante toda la presentación que aspiran a que esos objetivos sean inclusivos, a que la renta de una familia no sea obstáculo para que también se sume a transformaciones como las que representan el coche eléctrico o los paneles solares para abastecimiento de energía en casa.
De acuerdo con esa aspiración de una Canarias más sostenible y justa en lo social, Torres ha enumerado un puñado de objetivos más, como conseguir que la proporción de mujeres que participen en la esfera pública, profesional y social oscile entre el 40% y el 60%, que la brecha salarial entre hombres y mujeres caiga del 14,7% actual al 3% en 2030, o que la tasa de abandono escolar disminuya en cinco puntos, del 18,2% al 13%.
En paralelo, las islas aspiran a reducir sus tasas de desempleo a cifras comparables con la media del país y a elevar de forma importante su inversión en I+D+I para dejar de estar en los puestos de cola y escalar, también en este indicador, hasta la media.
Torres considera que Canarias tiene ya una guía clara de lo que debe de hacer en los 2.952 días que quedan para el 1 de enero de 2030, que «existe voluntad» de caminar en esa senda dentro de amplios sectores de la sociedad y que, además, hay oportunidades que aprovechar, como los 4.800 millones de euros que las islas van a recibir de la UE en ese periodo de los fondos ordinarios y del programa Next Generation para la recuperación tras la pandemia,
La Agenda 2030 ha sido firmada este jueves de forma simbólica en el auditorio de los Jameos del Agua por representantes del Parlamento, los cabildos, los ayuntamientos, las dos universidades públicas, las dos patronales y los dos sindicatos mayoritarios, organismos científicos, clubes deportivos y colectivos sociales.