El presidente del Cabildo, Casimiro Curbelo, junto a la consejera de Desarrollo Rural, Angélica Padilla, han avanzado, este sábado, la apuesta de la Institución por reforzar la actividad vitivinícola de la isla como herramienta para avanzar en la diversificación de la economía insular. Ambos destacaron el valor que tiene esta actividad por su calado en el sector primario, pero también por su funcionalidad como escaparate turístico en las medianías y las zonas del norte.
Así lo adelantó Curbelo, quien reiteró el compromiso de la Institución con el desarrollo de proyectos dirigidos a la consolidación del cultivo de la vid como tractor del sector primario, para lo que apuntó a la creación del centro de interpretación de la uva forastera que se unirá al circuito insular integrado por una quincena de bodegas distribuidas por la isla, y que el Cabildo ha unificado en una guía con el propósito de incentivar la comercialización y la divulgación de los vinos gomeros.
“Estamos en un buen momento para abordar las oportunidades que abre el sector vitivinícola en ámbitos como el desarrollo rural, la empleabilidad y la generación de riqueza, puesto que no solo hemos ganado en calidad durante este tiempo, sino que las singularidades de los cultivos de la vid, junto a la incorporación de bodegas abiertas a visitas, nos permiten dar un nuevo enfoque a esta actividad”, aseguró Curbelo.
La Institución insular ha incorporado 600 mil euros para incentivos directos que permiten la renovación de herramientas tecnológicas, material de etiquetado o bonificaciones de las cuotas a la Seguridad Social, recordó Curbelo, quien precisó que estas medidas económicas “son un balón de oxígeno para las pequeñas iniciativas empresariales que nacen vinculadas con el sector”.
La forastera gomera, joya de la viticultura
La forastera gomera ha protagonizado, este sábado, la presentación de un nuevo vino de la Bodega Altos de Chipude, que durante los últimos seis meses ha permanecido embotellado a un metro y medio bajo tierra, y a una altitud de 1.300 metros, explicó la viticultora, Gloria Negrín, quien, a su vez, es la propietaria de esta iniciativa vitivinícola ubicada en las medianías de la isla e integrada en la Denominación de Origen Vinos de La Gomera y en el sello de calidad Alimentos de La Gomera.
“Buscamos la excelencia de nuestra forastera gomera, a partir de la creación de vinos diferentes que primen la calidad y no la cantidad”, puntualizó Negrín, quien explicó que el cultivo de la viña de la que nace este vino está situado dentro del Parque Nacional de Garajonay en la denominada Finca Rajadero.