Sí se puede rechaza el intento del gobierno de Pedro Sánchez de “colar el gas en Canarias por la puerta de atrás con la excusa de la guerra de Ucrania”, asegura el portavoz de transición ecosocial del partido asambleario canario, Rubén Fuentes, en reacción a la decisión del gobierno central de incluir la liberalización de la instalación de regasificadoras en el Archipiélago dentro de una de las disposiciones finales del decreto aprobado esta semana por el Consejo de Ministros para establecer medidas urgentes a raíz de la guerra en Ucrania.
La organización ecosocialista canaria reclama un posicionamiento de los partidos del Archipiélago en contra del gas y, en este sentido, pone en valor “la inmediata reacción del presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales”, quien reiteró su planteamiento en contra del establecimiento del gas en Canarias, por no constituir una alternativa viable para las Islas.
Sí se puede destaca que “es imprescindible mantener a Canarias libre del gas y que las organizaciones políticas manifiesten expresamente su rechazo y abracen los pasos dados desde hace años por los movimientos sociales”, insiste el portavoz. “Está demostrado científicamente que el gas tiene un impacto medioambiental negativo, porque es contaminante, y más aún en Canarias, porque el coste ambiental y económico de su traslado es inabordable, además de la peligrosidad que conllevaría su distribución”.
Al mismo tiempo, Sí se puede subraya la contradicción entre esta decisión de liberalizar el establecimiento del gas en Canarias con el impulso de una agenda para la descarbonización del Archipiélago. “No es de recibo aprobar en el Consejo de Ministros el miércoles abrir la puerta a la implantación de las regasificadoras y comenzar el jueves en La Palma unas jornadas para abordar la descarbonización de las Islas y el futuro de las comunidades energéticas; o se impulsa un modelo o se impulsa el contrario, pero no se puede estar en las dos opciones”, advierte Fuentes al referirse a las jornadas impulsadas por la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno de Canarias y el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que el consejero de Transición Ecológica, José Antonio Valbuena, presenta como un espacio fundamental para impulsar la transición energética.
A juicio de Sí se puede, esta contradicción es producto de los intereses que está protegiendo el PSOE y del enfoque que impulsa su propuesta de cambio en el sector energético: “no se trata, en su caso, de impulsar una transición energética, real, de implantar un modelo transformador, una transición energética en manos de la ciudadanía; eso es lo que defiende Sí se puede, porque no es de recibo utilizar el discurso del cambio climático y el recurso de las energías renovables para constreñirse a una simple transición tecnológica que eluda la transición ecológica y social”.
“Sí se puede considera que si la energía como bien básico para la vida continúa en manos de los grandes oligopolios, si la propiedad y soberanía de los aerogeneradores eléctricos son de las mismas empresas que ahora explotan a la ciudadanía con tarifas altísimas y que presionan a los gobiernos para implantar sistemas de producción de energía contaminantes, peligrosos y costosísimos, no se habrá hecho una transición energética real, sino una operación de pacotilla, un truco de trileros para que todo siga en manos de los de siempre”, subraya el portavoz.