La CEOE de Tenerife mantiene la misma previsión de crecimiento de la economía canaria en 2022 que calculó a finales del año pasado, el 6,3%, a pesar del recorte desde el 7 al 4,3% en el pronóstico del Gobierno español para todo el país.
La estructura económica de Canarias, basada en los servicios, «puede ser una tabla de salvación» en esta coyuntura y permitir al archipiélago eludir la estanflación (crecimiento de precios sin crecimiento económico), según indicaron el presidente de la CEOE tinerfeña, Pedro Alfonso, y el economista José Miguel González durante la presentación del Informe de Coyuntura Económica de la patronal tinerfeña del primer trimestre de 2022.
En este contexto, la estructura económica de Canarias «puede ser un modelo de éxito», según Alfonso, si bien estos pronósticos están rodeados de incertidumbre porque dependen de que haya «una estabilidad controlada» en la evolución de la guerra en Ucrania, la situación en China o la atenuación de la pandemia, entre otros factores.
El informe trimestral de la CEOE mantiene que la economía de Canarias crecerá en 2022 un 6,3%, aunque la recuperación completa hasta la situación prepandémica será paulatina y se ralentiza, de modo que no se producirá a principios de 2023, sino a finales del próximo año.
Sin embargo, la situación presenta «riesgos e incertidumbres», como la posibilidad de que la inflación se transforme en estanflación, la interrupción de la cadena de suministros ante la situación en China, la extensión de la guerra en Ucrania, la subida de tipos por parte de los bancos centrales o la eliminación de los incentivos públicos.
González indicó que la subida oficial de los tipos de interés, que ya se ha anticipado en el mercado interbancario con el aumento del euríbor, tendría sentido si la inflación estuviera inducida por la demanda, pero en este caso es «una inflación de oferta», es decir, generada por las subidas de las materias primas y los combustibles y no por el tirón del consumo.
Ante una inflación de oferta se debería mantener una política fiscal y monetaria expansiva no solo en los tipos de interés sino también con una bajada de la presión fiscal a costa de recortar el gasto público «superfluo» o de acomodar el estado de bienestar a los recursos disponibles, pero sin reducir la inversión, según las propuestas de los empresarios tinerfeños.
Alfonso dijo que la CEOE está preocupada por el aumento del déficit público y del coste financiero de la deuda, que pueden llevar a recortes presupuestarios que se centren en rebajas en la inversión pública, a lo que se suma que solo uno de cada cuatro euros de los fondos de recuperación europeos están llegando a las empresas, y el resto se queda en las administraciones públicas.
González, responsable del informe de coyuntura, presentó una evolución positiva de la economía canaria en el primer trimestre de 2021, que consiguió reponerse del parón transitorio que supuso la irrupción de la variante ómicron de la covid-19 a finales de 2021. Así, indicadores adelantados como la matriculación de vehículos, el consumo de cemento o el consumo de electricidad están en el lado positivo.
Destacó que desde la entrada en vigor de la reforma laboral la tasa de temporalidad ha bajado del 87% al 72 por ciento, aunque advirtió del riesgo de que se detenga la contratación indefinida por la incertidumbre de los empresarios sobre cómo atender los picos de trabajo derivados del modelo turístico canario con la nueva legislación laboral.