La Plataforma por un Precio Justo del Plátano ha lanzado la propuesta de enviar como ayuda humanitaria a los afectados por los terremotos de Siria y Turquía los millones de kilos de esta fruta que se van a destinar en La Palma a la pica, es decir, la que se decide no comercializar por estrategia de mercado para que no haya sobreoferta y por la que los productores reciben a cambio una cantidad por kilo.
Este colectivo de plataneros palmero solicita además que esta iniciativa en cuanto a la logística sea asumida en sus costes por la Asociación de Organizaciones de Productores de Plátanos de Canarias (ASPROCAN) y que los organismos oficiales faciliten la consecución de este objetivo.
El portavoz de la plataforma, Juan Carlos Rodríguez, asegura que se recoge así la propuesta hecha por plataneros de la Isla Bonita y que su finalidad no es otra que actuar con la misma solidaridad que durante y después de la erupción volcánica de La Palma ha beneficiado a la isla, con miles de personas y de entidades que enviaron ayuda humanitaria al Valle de Aridane.
«Nosotros hemos sufrido una catástrofe natural», subraya Juan Carlos Rodríguez, «y ahora en Siria y Turquía están sufriendo otra, con la dolorosa consecuencia de miles de muertos y de heridos, así que qué menos que demostrar también desde La Palma ese gesto de humanidad enviando unos plátanos que, en realidad, por estrategias de mercado de las grandes organizaciones, vamos a tirar a la basura aunque realmente se encuentran en buen estado y son una fruta alimenticia de primer orden y pueden servir de ayuda alimentaria en esto momento a la población que ha sobrevivido a esa desgracia».
La cifra de muertos a causa de los sismos registrados el lunes en el sur de Turquía, cerca de la frontera con Siria, ya supera los 11.600, según los balances publicados hasta la fecha, que incluyen más de 9.000 fallecidos en territorio turco. El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha confirmado que hay más de 52.000 heridos, mientras que 6.444 edificios han quedado destruidos. En Siria ascienden a 1.262 los muertos y a 2.285 los heridos en las zonas controladas por el Gobierno y más de 1.280 muertos y 2.600 heridos en las que están bajo el dominio de fuerzas rebeldes.