El portavoz del grupo parlamentario Agrupación Socialista Gomera (ASG), Casimiro Curbelo, ha insistido en fortalecer las relaciones europeas para compensar la lejanía y los inconvenientes que padece Canarias al ser considerada como Región Ultraperiférica (RUP). Ante la celebración estos días en el Archipiélago de la reunión anual de las RUP, Curbelo ha insistido en optimizar los recursos destinados a estos territorios para aminorar las diferencias en el desarrollo en comparación con el territorio peninsular.
“En Canarias, como RUP, muchas veces no llegamos a invertir todas las partidas derivadas por tal consideración, vinculadas a la cooperación”, afirmó. En este sentido, invitó a reflexionar sobre este asunto a las autoridades estatales y europeas “ya que esos recursos que nos corresponden son vitales para, especialmente, favorecer que la ciudadanía canaria se encuentre en igualdad de condiciones con respecto a otros ciudadanos en el resto del país”.
A juicio de Curbelo, “las especificidades canarias y nuestro fuero están más que avalados por nuestra condición de territorio insular y alejado del continente, los cuales además están reconocidos no solo en la Constitución y en nuestro Estatuto de Autonomía, sino también en los tratados de la Unión Europea, por lo que, sin lugar a dudas, debemos aplicarlos, ya que somos conscientes de la necesidad de las aportaciones del Estado y de Europa en el sostenimiento de esta Comunidad Autónoma”.
En cuanto a la petición de otras regiones de ser reconocidas también como región RUP, como es el caso de Baleares, reclamó que “si bien es cierto que cada región puede solicitar lo que considera, las condiciones de Canarias nada tienen que ver con las de Baleares, como es el caso de la dependencia del exterior o el suministro eléctrico, ya que la distancia que las separa de la Península es mucho menor que en nuestro caso”.
Por último, remarcó la necesidad de que los estados miembros apoyen y se comprometan con las RUP para favorecer el crecimiento de las mismas. “El caso de Canarias con la migración ilegal es un ejemplo de ello, en el que los Veintisiete no pueden mirar para otro lado, sino que es necesario un mayor compromiso y refuerzo de las políticas europeas”.