El presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, ha solicitado, este viernes, que el Gobierno central paralice la subida de tasas aeroportuarias en las infraestructuras de Canarias prevista por AENA.
“No es un buen momento para aplicar una subida generalizada a las tasas aeroportuarias en un porcentaje de 4,09%, por lo que el Estado debe replantearse esta decisión y permitir que los aeropuertos canarios queden exentos de esta medida, y más si tenemos en cuenta que los aeródromos isleños batieron récord de pasajeros en 2023 con 48,8 millones de personas”, apuntó.
A juicio de Curbelo, el ente “debe ser consecuente con la realidad económica y social de Canarias y la condición archipielágica, además de que se trata de una región alejada del continente, por lo que los desplazamientos aéreos son indispensables en nuestro sistema de comunicación y no tenemos otras alternativas, como sí sucede en el resto del país”.
Insistió en que, además, nuestro Régimen Económico y Fiscal precisa que “Canarias debe contar con medidas de bonificación en cuanto a la conectividad, como es el caso de la bonificación para residentes canarios, tendentes a cohesionar el territorio y a favorecer la igualdad de oportunidades”.
“Este incremento va a suponer un notable impacto en la economía de las Islas, de su tejido comercial, de sus residentes y en el turismo, ya que la misma llevará aparejada que las compañías aéreas tendrán que incrementar las tarifas que se aplican, por lo que serán los ciudadanos los que lo padezcan directamente”, indicó. “Somos totalmente contrarios a esta subida, de hecho, las tasas deben mantenerse estables o, incluso, con una tendencia a la baja”, añadió.
Curbelo manifestó la importancia de que en este tipo de decisiones se tengan en cuenta la opinión de las administraciones canarias, por lo que planteó una “reflexión serena sobre este planteamiento para que, desde AENA y el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, se atienda a la petición que se hace de Canarias”. Añadió que la misma “no se trata de una actitud caprichosa, sino de velar por la igualdad de oportunidades, la cohesión territorial y el fortalecimiento del tejido económico de las islas”.