El portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Agrupación Socialista Gomera (ASG), Jesús Ramos, ha preguntado este viernes, en el Parlamento, a la consejera de Presidencia, Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias, Nieves Lady Barreto, cómo tiene previsto implementar el nuevo modelo de Función Pública anunciado recientemente por el ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, José Luis Escrivá.
Tras señalar que “estamos ante uno de los grandes retos que tienen las administraciones públicas para los próximos años, con objeto de mejorar su respuesta a la ciudadanía, tanto en el ámbito del Gobierno de Canarias como de los cabildos y ayuntamientos”, recordó el interés mostrado por ASG para propiciar una reforma de la administración pública dirigida a incrementar la productividad y la eficiencia de los servicios que presta a la población.
A su juicio, tal y como plantea el ministro Escrivá, “es preciso disponer de una administración más moderna e innovadora, con una estructura adaptada a los cambios tecnológicos y a las crecientes demandas de servicios públicos más accesibles y eficientes, y que garanticen mejor los derechos de la ciudadanía”.
Según indicó, “esto pasa por contar con plantillas adecuadas –en cantidad y calidad, formadas y con experiencia–, para lo que se requieren procedimientos de captación y retención de talento, y para ello es preciso diseñar itinerarios de carrera motivadores que permitan competir con el sector privado”.
Jesús Ramos manifestó su coincidencia con la propuesta estatal de “construir un nuevo modelo de función pública, basado en la gestión previsional de efectivos, más autonomía y responsabilidad a las organizaciones en la planificación de sus plantillas, procedimientos de acceso al empleo público y promoción profesional basados en competencias, y posibilidades de desarrollo profesional más estimulantes”.
Igualmente, compartió “la supresión de la tasa de reposición en 2025, que promueve un crecimiento vegetativo de las plantillas, y su sustitución por otro mecanismo que se base en los servicios públicos que presta el Estado de Bienestar y en la planificación presupuestaria plurianual”, así como “un modelo nuevo de recursos humanos que permita desarrollar políticas de upskilling y reskilling, permitiendo aprovechar así al máximo el potencial de los empleados públicos y ofreciéndoles nuevas e interesantes posibilidades en sus carreras”.
Reiteró su propuesta de utilizar el Instituto Canario de Administraciones Públicas (ICAP) como herramienta para la transferencia del conocimiento por parte de los empleados más veteranos a los noveles, el aprendizaje continuo y el reciclaje laboral. Y también su demanda de que todas estas ideas fluyan hasta llegar a las administraciones locales, cabildos y ayuntamientos, que son los más cercanos. Una misión que, dijo, “debe liderar el Gobierno de Canarias, para que alcance, de forma especial, las islas no capitalinas, donde suele ser más complicado”.