El consejero de Política Territorial, Cohesión Territorial y Aguas del Gobierno de Canarias, Manuel Miranda, ha dado cuenta hoy al Consejo de Gobierno de la declaración de emergencia de la obra de impermeabilización del depósito de Igualero, en La Gomera, debido a las graves deficiencias detectadas en la estructura de esta instalación durante el desarrollo de otro proyecto en la zona.
La declaración de emergencia tiene por objeto garantizar el abastecimiento de agua a la población en la parte alta de la isla, y asegurar la disponibilidad de recursos en caso de incendio forestal, por lo que las obras se han tenido que iniciar con urgencia desde la Dirección General de Aguas en coordinación con el Consejo Insular de Aguas.
Según los informes técnicos, la situación estructural del depósito tiene importantes deterioros de extrema gravedad que impiden su rehabilitación para la puesta en servicio con las garantías de seguridad necesarias. El deterioro se detectó durante la ejecución de las obras de mejora de las conducciones y estaciones de bombeo de esta infraestructura, que da servicio a la zona alta de los seis municipios de La Gomera.
El hecho de que no exista alternativa posible que sustituya este depósito para el almacenamiento de agua potable, unido a la sequía pertinaz que viene padeciendo La Gomera y el resto de las islas del archipiélago, han obligado a tomar esta medida de emergencia que, así mismo, tiene en cuenta la cercanía del verano con un más que previsible aumento de la población y del riesgo de incendio forestal.
El depósito de Igualero se encuentra dentro del Parque Nacional de Garajonay, y además surte al caserío de Vegaipala, zona en la que existe un campamento de acogida para inmigrantes.
Todas estas circunstancias fundamentan la declaración de emergencia para un proyecto que ya está en ejecución, con un coste aproximado de 650.000 euros, y que tiene como objetivos la demolición de los actuales forjados, la instalación de nuevos micropilotes, de vigas, del alzado y de la losa inferior, entre otros trabajos.
En la actualidad está previsto hacer unas pruebas para determinar la afección de dichas deficiencias que, en caso de no ser más graves de lo inicialmente detectado, podría permitir concluir esta obra de emergencia antes del mes de agosto de este año.
Manuel Miranda ha destacado la coordinación con el Consejo Insular de Aguas de La Gomera “para diseñar y acometer en el menor tiempo posible esta actuación de emergencia, trabajo en el que ha tenido que ver también la eficacia de los técnicos, tanto insulares como de la Dirección General de Aguas del Gobierno de Canarias”.