San Sebastián de La Gomera celebró la primera ruta de exploración de la Playa de la Cueva, el Faro de San Cristóbal y Abalo, para definir las fortalezas y debilidades de la nueva ecoárea de la isla, que se une a las ya existentes en Tapahuga – Playa de Santiago, en los municipios de Alajeró y San Sebastián, y la Ecoárea del Charco del Conde – Charco de La Condesa y Playa de Vueltas, en el municipio de Valle Gran Rey.
Financiado por la Consejería de Turismo y Empleo del Gobierno de Canarias, y con la cofinanciación de los fondos FEDER de la Unión Europea, el Proyecto Ecoáreas es una iniciativa que persigue dinamizar las zonas litorales o costeras de interés ecoturístico, impulsando usos, aprovechamientos y beneficios sostenibles del patrimonio natural.
Angélica Padilla, alcaldesa de San Sebastián de La Gomera, destacó que “este proyecto se lleva a cabo en distintos puntos de Canarias para dinamizar zonas costeras, con la colaboración de las instituciones, entidades privadas y ciudadanía. De la mano del Proyecto Ecoáreas, y buscando el compromiso y el consenso de todos los sectores de la sociedad, podremos lograr el desarrollo de planes a corto y largo plazo que mejorarán la situación, el estado y el uso de estas zonas, manteniendo y protegiendo la riqueza paisajística, cultural e histórica de la Playa de la Cueva y Abalo”.
Eva Vizcaíno, técnica dinamizadora del Proyecto Ecoáreas, señaló que “este proyecto tiene distintos objetivos ambientales, turísticos y económicos que pretenden contribuir a la sostenibilidad de los entornos costeros a través de la dinamización de usos y espacios, y de la creación de una certificación que acredite la calidad de las áreas ecoturísticas, implicando siempre al mayor número de beneficiarios socioeconómicos”.
En la primera jornada de mapeo los participantes destacaron y analizaron una serie de fortalezas y debilidades que, desde su punto de vista, están presentes en la zona comprendida entre la Playa de la Cueva, el Faro de San Cristóbal y la Playa de Abalo, proponiendo posibles soluciones y mejoras, además de fórmulas efectivas y sostenibles para potenciar los valores naturales y patrimoniales comprendidos en esta nueva ecoárea.
Raquel Concepción, técnica dinamizadora del Proyecto Ecoáreas, adelantó que tras este primer mapeo de la zona se organiza un nuevo encuentro, abierto también a todos los vecinos y vecinas que deseen asistir, para analizar las líneas de acción surgidas de los propios participantes en la ruta y recordó que “la declaración como Ecoárea podría dar lugar al inicio de una serie de acciones y medidas coherentes de cara a su potenciación, a través de inversiones específicas vinculadas a la promoción, puesta en valor y gestión de la zona”.